Las sospechas sobre el número 2 de Rosell enturbian las elecciones de la patronal castellano leonesa

Los empresarios de Salamanca acusan a Jesús Terciado de apropiación indebida en la gestión de Cecale

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Las elecciones para la junta directiva de la patronal castellano leonesa Cecale contarán con un invitado inesperado: un juez. Su presidente, Jesús Terciado, deberá defenderse de las acusaciones por apropiación indebida sustanciadas en una querella presentada por la patronal de Salamanca, Confaes. Su responsable, Juan Antonio Martín Mesonero, ha impulsado la demanda.

El acusado es también presidente de Cepyme y vicepresidente de la CEOE, organización que ha optado por observar cómo se desarrollan los hechos sin inmiscuirse, convencida, sin fisuras, de la inocencia del estrecho colaborador de Juan Rosell. Terciado, por su parte, se ha desentendido de la disputa y asegura que los querellantes “están solos”. Pretenden “atacar a la institución”, dice el demandado, porque está fuera de la carrera electoral. Renunció antes de que se dudara de su gestión.

Pero de momento, el proceso ha logrado retrasar los comicios a septiembre, aunque la nueva convocatoria sigue sin fecha concreta. La división es tan amplia, que es imposible reunir a la junta directiva que dé luz verde al nuevo proceso de elección. Terciado cuenta con el apoyo del resto de socios, pero los de Salamanca, y sus aliados, los empresarios de Zamora, liderados por Ángel Herrero, pretenden hacer coincidir los planos electorales y judiciales, según fuentes próximas a la disputa.

El asunto ha ido a mayores. Todo comenzó con las sospechas que el presidente de los empresarios salmantinos tiene sobre la actuación de Terciado al frente de Cecale. Los indicios parecían suficientes ya que consiguió una orden judicial para registrar el departamento de contabilidad de la patronal. Mesonero entró con la Policía en la sede vallisoletana y consiguió parte de la información que buscaba. Los empleados de la patronal aún recuerdan el momento con amargura.

A diferencia de otros casos, como el de la UPM en Catalunya, los trabajadores de Cecale parecen respaldar a su jefe, a la mano derecha de Rosell.

La tarjeta

Mesonero buscaba pruebas sobre supuestos gastos privados de Terciado pagados con la tarjeta de crédito de representación. Un apunte contable pareció dar la razón a los salmantinos, aunque, después, el souffle bajó. El extracto apuntaba primordialmente a un local: La Tentación. Los de Mesonero vieron el cielo abierto.

No perdieron el tiempo y, esta vez sin la Policía, fueron a documentar gráficamente la instalación. Esperaban encontrar el Riviera de la región. Pero toparon con un restaurante normal y corriente, según fuentes cercanas a la investigación. Sin embargo, el trabajo de campo se extendió a otros espacios frecuentados por Terciado para solidificar la querella por presunta apropiación indebida.

Negociación

Tras la investigación, y con la querella puesta en los juzgados, Mesonero ha intentado negociar con Terciado infructuosamente. El presidente de Cecale sólo se reunirá cuando retiren la querella. Mesonero la mantiene y el Juzgado de Instrucción número 6 de Valladolid ha citado el vicepresidente de la CEOE a declarar el 23 de octubre como imputado.

Economía Digital

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