Mas frena la adjudicación de Aigües Ter Llobregat

El President pide un análisis completo de las dos ofertas que se han presentado, Acciona y Agbar

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La privatización de Aigües Ter Llobregat (ATLL) no se completará en el plazo inicial previsto por el Govern de la Generalitat. La conselleria de Territori i Sostenibilitat, dirigida por Lluís Recoder, ha realizado los análisis económicos y técnicos en muy poco tiempo y este jueves, sólo 20 días después de iniciar los trámites de la operación, la mesa de contratación ya había escogido el ganador. Acciona, según fuentes sindicales. Pero la adjudicación exprés se ha frenado en el último momento por orden directa de Presidencia, informan desde el entorno de Artur Mas.

El político es consciente del revuelo políticoeconómico que ha generado este proceso y no quiere dar un paso en falso. Sobre todo cuando las elecciones están a la vuelta de la esquina y está en juego una concesión de 50 años. Mucho tiempo para que salgan a la luz errores en el proceso que puedan ir en contra de CiU.

Nuevo informe

El mensaje del President, explican los mismos interlocutores, ha sido claro: la privatización de ATLL se queda en el congelador hasta que no se haga otra revisión a fondo de las ofertas. Esto implica tener en su poder un informe detallado que garantice jurídicamente que todos los compromisos que Acciona y Agbar han asumido en sus ofertas llegarán a buen puerto.

Mas quiere evitar que le impugnen la adjudicación o que la pulcritud del proceso se decida en un tribunal. La cúpula de Agbar dejó claro este viernes que está en pie de guerra. Fiscalizará toda la operación y no tiene reparos en iniciar cuantos litigios sean necesarios si la oferta de Acciona se impone a la suya y la Generalitat modifica algún punto del contrato marco a posteriori.

Garantías

Esto incluye el precio que quieren cobrar a la ciudadanía por los metros cúbicos del agua (una factura que, sea quien sea el adjudicatario final, subirá de forma destacada) y las garantías de empleo en ATLL. Son los dos apartados que más se han contado en la valoración final de las ofertas y en los que Acciona ha pasado la mano por la cara a Agbar, cuya oferta técnica ha recibido mejor valoración por parte de los técnicos del departament dirigido por Recoder.

El grupo presidido por José Manuel Entrecanales propone cobrar 0,7088 euros por metro cúbico de agua en un plazo de dos años y mantener el 100% de la ocupación actual en el medio siglo que dura el contrato. La previsión de la compañía de Barcelona encabezada por Ángel Simón es mucho menos optimista para los consumidores catalanes y los trabajadores de ATLL: propone cobrar 0,79 euros desde el momento en el que se haga la adjudicación y mantener los puestos de trabajo intactos a lo largo de 40 meses.

La cúpula de Agbar ha denunciado que las cifras de Acciona no se ajustan a la realidad. Básicamente, porque no tienen firmado el crédito necesario para desembolsar los 300 millones de euros en el momento en el que se resuelva la adjudicación y no han imputado ningún coste financiero en su oferta, admiten fuentes empresariales consultadas por Economía Digital. Simón sí que tiene rubricado un préstamo sindicado con varias entidades que lidera uno de sus accionistas de referencia, La Caixa.

Discrepancias internas

La intervención de Artur Mas ha caído como un jarro de agua fría en la conselleria de Territori i Sostenibilitat. Recoder había mostrado sus reparos iniciales en adjudicar de forma tan precipitada ATLL para hacer caja. “En circunstancias de economía de guerra, si conseguimos unos cuantos centenares de millones de euros podremos cumplir mejor con los déficits y nos ahorraremos recortar en ámbitos más sensibles”, explicaba este jueves Mas en una entrevista televisiva en el programa 8 al dia.

Pero con el proceso en marcha, han salido otra vez a la luz las viejas rencillas con el President, tal y como detallan desde el entorno del político. Desde la alcaldía de Sant Cugat del Vallès (Barcelona), Recoder fue uno de los rivales más firmes de Mas durante sus dos mandatos en la oposición. Finalmente, entró en el Ejecutivo y enterraron el hacha de guerra.

El conseller de Territori i Sostenibilitat es también amigo íntimo del consejero delegado de Media Planning y presidente del consejo editorial del periódico Ara, Ferran Rodés. El empresario catalán es, junto a Manel Torreblanca (Barcel Euro), los dos hombres de negocios locales que se han unido al proyecto de Entrecanales. De hecho, Rodés tiene silla en el consejo de administración de Acciona. A su vez, Isidro Fainé forma parte del máximo órgano de gestión de Agbar.

Sea en el sentido que sea, Mas no quiere que la adjudicación de ATLL tenga margen de error.

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