Sólo un tercio de las empresas españolas cumplen con la digitalización
El 80% de los ingresos de las empresas industriales proceden, todavía, de productos y servicios tradicionales
La planta de Seat en Martorell (Barcelona). EFE/Marta Pérez
España no hace los deberes en materia de digitalización. Sólo una de cada tres empresas nacionales se encuentra en un nivel avanzado en este ámbito, según revela el informe Global Digital Operations Study 2018 elaborado por la consultora estratégica de PwC. “El 68% de las compañías industriales españolas están en un estadio de digitalización medio o bajo”, señala el estudio.
El texto distribuye las sociedades en cuatro categorías. Los líderes digitales son solamente el 5% y las innovadoras el 27%. En el cajón de cola, en cambio, están las seguidoras digitales (el 47%) y las novatas (el 21%). Son la cultura digital, el nivel de madurez del ecosistema digital y las capacidades para incorporar nuevas tecnologías las tres características que marcan el puesto de cada empresa.
Prueba de que el camino a recorrer todavía es largo, es que actualmente el 80% de las compañías industriales procede de productos y servicios tradicionales. Sólo el 4% de las entradas procede de servicios y soluciones 100% digitales. El resto (16%) tienen “algún” componente digital.
El 89% de las empresas prevé aumentar la contratación de trabajadores cualificados gracias a la digitalización
Las empresas industriales españolas creen que la digitalización de sus procesos de fabricación y de producción tendrá un impacto directo en la gestión de su capital humano. Un 89%, por ejemplo, prevé que aumente la contratación de trabajadores cualificados en los próximos cinco años y un 50% espera también un crecimiento del salario medio. Por el contrario, un 61% cree que el empleo de aquellos profesionales menos cualificados disminuirá.
Para Charles Kirby, socio del sector Industrial de PwC, “la transformación 4.0 en el mundo industrial integrando cadenas de valor y desarrollando la digitalización de productos y servicios es ya una realidad que está aportando mejoras significativas de productividad y nuevos servicios que fidelizan y aumentan ventas de los clientes. Las empresas que no estén ya avanzando decididamente en este campo se encontrarán con importantes problemas de competitividad a corto y medio plazo”.
El estudio se ha elaborado a partir de entrevistas 1.155 directivos de compañías industriales en 26 países.
