Caixabank marca músculo con menores dotaciones y más rentabilidad
El beneficio semestral crece el 75% hasta los 708 millones de euros, la cifra deja corta las previsiones aunque el banco pierde velocidad en el segundo trimestre
Caixabank eleva en un 75% el beneficio semestral gracias a las menores provisiones contra insolvencias, la incorporación del negocio de banca minorista de Barclays y las ganancias extraordinarias. El saldo excedente se situó en 708 millones frente a las previsiones de 698 millones de euros.
En el segundo trimestre, el beneficio se situó en 333 millones de euros. Los analistas esperaban un resultado de 323 millones de euros. En comparación intertrimestral, el beneficio bajó un 11%.
Por su parte, el margen de intereses subió el 12,6% a 2.270 millones, mientras que el margen bruto aumentó el 21,7% a 4.564 millones. En el mercado habían previsto un margen de intereses de 2.268 millones de euros y un margen bruto de 4.128 millones.
Al calor de la mejoría económica general, la tasa de morosidad se redujo en junio hasta situarse en el 9% –frente al 9,7 de marzo–. Caixabank mantuvo sin cambios la ratio de capital, en términos de Basilea III, en el 11,5%.
Mejora en rentabilidad
La rentabilidad también ha subido. El grupo que preside Isidro Fainé terminó el segundo trimestre con un ROTE (retorno sobre recursos propios excluyendo fondo de comercio) del 4,9%, frente al 4,4% del primer trimestre. En el marco de su plan estratégico, el banco catalán prevé elevar la variable hasta el 12% en 2017.
Adicionalmente, logró elevar la ROE (rentabilidad sobre capital) al 3,9% en el segundo trimestre desde el 3,4% del primero.
Los analistas estarán atentos a cualquier indicación que pueda hacer el banco sobre eventuales movimientos tras abandonar la oferta sobre el 44,1% en el portugués BPI y que ahora estudia poner en venta, según avanzó Economía Digital. Además, cualquier manifestación sobre una eventual reorganización de su cartera de participadas será foco de interés entre los inversores.
