El Liceu adapta el acceso del público ante la ausencia de acomodadores
El teatro aconseja a los espectadores llegar con antelación y así evitar cualquier molestia derivada de la huelga
El Gran Teatre del Liceu aconseja a los espectadores que acudan con antelación a la función de Don Pasquale, la última ópera de la temporada, para así evitar problemas ante la huelga de acomodadores que afecta a esta institución desde hace varios días. A lo largo de la tarde de este martes, la cuenta oficial de Twitter del Liceu ha publicado varios mensajes en los que se recomendaba al público no llegar a última hora.
Además, se indicaba que los espectadores deben pasar por sí mismos las entradas por la máquina lectora, que adquieran los programas de mano en taquilla y que varios de los accesos al teatro permanecerán cerrados, se prevé, durante esta y las próximas representaciones (están previstos ocho pases más de esta función en los próximos días).
Recomendamos a los espectadores de #DonPasquale que vengan hoy al Liceu con antelación para evitar colas. Abrimos sala a las 19h (1/3)
— Gran Teatre Liceu (@Liceu_cat) junio 16, 2015
Hoy el acceso al Liceu requerirá la validación de las entradas y/o tarjetas abonos por máquina lectora por parte de los espectadores (2/3)
— Gran Teatre Liceu (@Liceu_cat) junio 16, 2015
Recomendamos adquirir programa de mano en taquillas. Los accesos de c/ Sant Pau y cafetería (Espai Liceu) permanecerán cerrados (3/3)
— Gran Teatre Liceu (@Liceu_cat) junio 16, 2015
La función de este martes es la primera abierta al público desde la convocatoria de huelga de los acomodadores el pasado 4 de junio. Entre las novedades provocadas por esta situación, está que los espectadores tendrán que localizar por sí mismos sus asientos; una tarea que será facilitada por la mejora en las señalizaciones en el acceso, según informan fuentes del Liceu.
Desde el teatro barcelonés también se insiste en que la incidencia de esta huelga en su caso no es comparable a lo ocurrido en el Auditori. Entre otras razones, porque alrededor del 60% del público del Liceu es abonado y, por tanto, conoce dónde se encuentra su asiento.