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ERC continúa dándole vueltas al candidato ideal para ocupar la presidencia del Parlament y sustituir a Carme Forcadell. Descartada la opción de Carles Mundó, que ha abandonado la política, el partido republicano continúa barajando nombres. Los tres últimos que están sobre la mesa son los de Ernest Maragall, Toni Castellà y Raül Romeva.

Maragall gusta porque responde al perfil clásico de un presidente del Parlament veterano, con gran experiencia política. El hermano de Pasqual Maragall ha pasado por el Ayuntamiento de Barcelona, por el Parlament de Cataluña, por el Gobierno de la Generalitat y por el Europarlamento.

Castellà, por su parte, agrada porque sus convicciones independentistas son inequívocas y sería una garantía para avanzar de forma determinada hacia la implementación de la República. El ex dirigente de Unió, ahora en Demòcrates de Catalunya, se llevaría un premio gordo, muy por encima del peso político de su formación, lo cual no acaba de convencer a ERC.

Y Romeva es el que tiene un mejor perfil para internacionalizar el proceso soberanista, ya que lleva dos años dedicado a esta tarea, pero arrastra un problema que no es menor y es sus problemas con la justicia. Cabe recordar que el ex consejero de Exteriores estuvo en prisión preventiva y tiene cuentas pendientes con los tribunales.

Junts per Catalunya dará vía libre a cualquier propuesta de candidato a presidente del Parlament que formalice ERC, ya que interpreta que forma parte de sus acuerdos de legislatura.

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