Amazon se mete en un lío por vender imitaciones

Amazon recibe una orden para que deje de mostrar publicidad de marcas de imitación cuando los usuarios hacen búsquedas con errores

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Una corte alemana le ordenó a Amazon dejar de hacer publicidad dirigida a usuarios que se equivocan cundo buscan productos de Birkenstock y escriben mal el nombre de la marca alemana de calzado en los buscadores o en su sitio web, según el diario alemán Der Spiegel.

Según una demanda ganada por Birkenstock, Amazon le muestra a los clientes resultados de marcas de imitación. La empresa amenazó con dejar de vender sus productos en la plataforma en noviembre porque dice que Amazon no hace el esfuerzo suficiente para detener los productos de imitación.

Una simple búsqueda en Amazon puede arrojar varios productos no originales de vendedores externos, una práctica que afecta a todo tipo de vendedores en el sitio y que ya le ha causado problemas a Amazon en el pasado cuando varios productores le pidieron que actuara.

Amazon respondió que tomaría medidas para acabar con los productos de imitación en su plataforma, pero los esfuerzos no han sido suficientes. Como dijo uno de los vendedores afectados hace un año, «esto es una epidemia», y da la impresión de que por cada producto de imitación que se elimina se agrega otro.

Amazon no ha demostrado que sea capaz de controlar a sus vendedores externos

La orden de la corte de Dusseldorf es preliminar pero sienta un precedente no sólo en la lucha contra los productos de imitación en el comercio online sino también contra algunas prácticas populares de publicidad digital.

Para la revista Fortune, la orden judicial está mal enfocada, pues la técnica de redirigir a los usuarios que cometen errores ortográficos al buscar un producto es una que usualmente ayuda a los clientes a encontrar lo que están buscando, mientras que los productos de imitación se presentan como copias exactas que están listados en Amazon gracias a vendedores externos inescrupulosos.

Desde ese punto de vista, no es la táctica publicitaria el problema, sino la incapacidad de Amazon para controlar los productos que venden terceros.

Economía Digital

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