Huelga en las centrales nucleares catalanas por el convenio colectivo

Las tres centrales nucleares catalanas, Ascó y Vandellós, empezarán este viernes una huelga que se prolongará hasta el lunes como protesta por el bloqueo en la negociación del convenio colectivo. Lo que tenía que ser una pugna laboral ha derivado en un conflicto con el Ministerio de Industria. CCOO, UGT y APLOC han denunciado que los servicios mínimos decretados son “abusivos” y que “superan con mucho los que fijó con ocasión de las huelgas generales convocadas con anterioridad”.

El departamento dirigido por José Manuel Soria no ha detallado los porcentajes mínimos que se deben cubrir en cada departamento para que el paro en las centrales no genere ningún peligro. Los sindicalistas señalan que la falta de la información obliga de facto a trabajar a los 1.094 empleados en plantilla. Consideran que el Gobierno ha dado un espaldarazo sin fisuras a Endesa e Iberdrola, las dos compañías que gestionan las centrales.

Alegaciones y recursos

El caso que más ha enervado el personal es el de Ascó I, que está en parada programada para la recarga de combustible y, por lo tanto, “ni genera energía ni la protesta laboral puede afectar al abastecimiento de la planta”, señalan los trabajadores.

Los sindicatos han presentado alegaciones a los servicios mínimos y han anunciado que presentarán “los recursos pertinentes” contra la decisión. “Estamos ante una decisión política de las grandes eléctricas y en detrimento de los trabajadores y de la sociedad”, reiteran.

Más paros

Si la negociación del convenio colectivo sigue enquistada, los empleados llevarán a cabo tres protestas más: del 30 de mayo al 2 de junio, del 6 al 9 de junio y del 13 al 16 de junio. Dejan claro que el consumidor final no se verá afectado por la protesta. Indican que si se realiza de forma programada y con suficiente anticipación, como es el caso, tendría un impacto parecido a uno de los parones habituales para realizar tareas de mantenimiento, seguridad o reparación.