Barça: en un año histórico, estancamiento de beneficios

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Ni siendo un equipo hexacampeón, el FC Barcelona se escapa del cada vez más agotado modelo económico de los clubs deportivos españoles. En el primer año después de las seis copas, con todo el viento a favor y unos elevados ingresos, las cuentas del club catalán no conseguirán reflejar una mejora sustancial de los beneficios de explotación, que, según los cálculos del vicepresidente Joan Boix, serán “iguales o superiores a los del año pasado pero inferiores a lo presupuestado”.

En la presentación de las cuentas de los seis primeros meses de ejercicio, correspondientes al período julio-diciembre, Boix, ha concretado que en la temporada 2009-10, el club conseguirá unos beneficios de explotación que rondarán los 22 millones de euros, bastante menos de los 30 que se calcularon en junio cuando se elaboraron los presupuestos, y los mismos que se obtuvieron en la temporada 2008-09.

Y eso, a pesar de que el club mantiene la previsión de alcanzar una facturación de 405 millones de euros. De momento, en los seis primeros meses de temporada, ya se han ingresado 222,8 millones y se han gastado 211, con lo que, una vez descontados los gastos financieros, el resultado neto ha sido de ocho millones de euros.

Esos números han sido posibles gracias al incremento de los ingresos de todas las partidas del club (un 15% más en marketing y un 11% más en derechos audiovisuales, por ejemplo), pero especialmente gracias a la venta de una parcela que el club tenía en Sant Joan Despí, por la que ha conseguido 15 millones netos, y al traspaso de Samuel Eto’o, con el que se obtuvieron otros 20 millones. Así, los ingresos que más crecieron, un 86%, fueron los de traspasos y otros.

Si bien los ingresos subieron un 19,7%, la partida de gastos, que se incrementó un 27,1%, se resintió, y mucho, de los primas que se tuvieron que pagar por los títulos conseguidos por los hombres de Guardiola y por los nuevos fichajes. En total, el club desembolsó 118,5 millones en salarios deportivos, un 41,9% más que en la temporada anterior.

Además, el director general de la entidad, Joan Oliver, ha admitido que la deuda neta acumulada ha aumentado. «En junio pasado hubo una reestructuración de la deuda, mediante un crédito sindicado (120 millones de euros), y ahora la deuda neta se sitúa en torno a los 250-260 millones de euros», ha dicho.

Con todo, los responsables del Barça son optimistas porque creen firmemente que el hecho de ganar títulos proporciona al club un valor más elevado en el mercado mundial, gracias a lo cual la facturación puede seguir creciendo sin mayores dificultades. Los ingresos puede, pero los beneficios aún no.

Economía Digital

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