Caixa Penedès negocia una SIV con cajas no catalanas

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La rueda de prensa en la que Ricard Pagès, director general de Caixa Penedès explicaba los resultados de la entidad durante el pasado ejercicio tuvo, como era de esperar, un único protagonista: la posición en la que finalmente quedaría la aún tercera caja catalana en el actual proceso de fusiones.

Y a trancas y barrancas Pagès fue desvelando el misterio. A medias. El máximo ejecutivo de la caja reconoció con la fusión con Caixa Laietana estaba completamente parada, no muerta, por diferencias definitivas en el modelo de futuro de la nueva entidad.

Previsiblemente, Penedès contemplaba la fusión con Laietana como un primer paso hacia un conglomerado más potente con otras cajas del resto del estado, mientras que Laietana no quería ir más allá y acabar en una entidad en la que su presencia fuera insignificante.

La alternativa para Caixa Penedès en la que ya trabajan y que, según sus propias palabras, podría estar pronto operativa es una fusión virtual, una SIV, con otras cajas del Estado español, que les permitiría mantener una personalidad propia y conseguir sinergias mediante la creación de un banco común donde las cajas “fusionadas” aportan una serie de activos (servicios centrales, marketing, gestión de tesorería…), y una parte de soberanía, pero sin que les obligue a perder su identidad.

Pagès se negó, aludiendo a un acuerdo de confidencialidad suscrito, a dar más detalles ni sobre los posibles socios ni sobre otros aspectos del proceso de fusión. Lo único que afirmó con rotundidad es que en ningún caso contemplan una integración en otra entidad de una manera subordinada.

Por lo que respecta puramente a los números, 2009 no fue bueno para Caixa Penedès y, previsiblemente tampoco lo serán ni el 2010 ni el 2011. De hecho, Ricard Pagès reconoció en algún momento de la rueda de prensa que tienen un plan B por el que si no hubiese ninguna concentración “la caja podría dar beneficios también en el 2010 y en el 2011”.

El año pasado, el beneficio, después de impuestos, atribuido grupo de la caja fue de 40,6 millones de euros, prácticamente la mitad que en el 2008, unas cifras que Pagès justificó por las fuertes dotaciones realizadas, un argumento común entre las entidades financieras, como si estos apuntes contables estuviesen al margen de la realidad de la entidad.

Pagès valoró, en cualquier caso, como “positivos” estos resultados por el marco de deterioro económico en el que se habían logrado y destacó el crecimiento del volumen de negocio, del 6%; la contención de la morosidad (4,83%, aunque reconoció que podría llegar al 8% este año), y la mejora del ratio de solvencia en 1,8 puntos.

Caixa Penedès ha reducido su plantilla en el 2009 en 198 personas y en 39 su red de oficinas. Ricard Pagès anunció un fuerte plan de reducción de costes para este año, pero no quiso cuantificar las medidas.

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