Los auditores mantienen las dudas sobre la continuidad de Fergo Aisa

LA CONSTRUCTORA CONFÍA EN CONSEGUIR 20 MILLONES MÁS DE CAPITAL ANTES DE OCTUBRE

Recibe nuestra newsletter diaria

O síguenos en nuestro  canal de Whatsapp

La operación societaria que dio lugar a Fergo Aisa sigue manteniendo en vilo a los mercados. La constructora barcelonesa que preside Carlos Fernández Gómez no ha conseguido restablecer el equilibrio financiero al que le obligó la banca en abril pasado cuando acordaron novar el crédito de 84,1 millones de euros que la compañía mantenía con diferentes entidades.  Espera cerrarlo antes de finalizar octubre.

La auditora BDO considera que se mantiene la incertidumbre sobre la continuidad de la sociedad en un informe fechado el 30 de julio pasado y que acompaña a los estados contables de la empresa cotizada, que acaba de presentar los resultados referidos al primer semestre del ejercicio ante la CNMV. La dirección de la sociedad, en cambio, asegura que los planes de reflotamiento siguen su curso, pero con un ligero retraso fruto de la situación del mercado financiero. Antes de octubre confían en entrar otros 20 millones de capital procedente de inversores institucionales con los que ultiman acuerdos.

Fergo Aisa es el resultado de la fusión de Construcciones Fergo , propiedad de Carlos Fernández Gómez, y Aisa, una promotora inmobiliaria que impulsó el abogado del Estado Genís Marfà y en la que se embarcaron algunos de los principales empresarios de la ciudad. Gracias a la integración con Fergo, Aisa consiguió evitar una situación de virtual insolvencia.

Oxígeno financiero

Tras la unión de ambas en una única sociedad, y para afrontar muchas deudas vencidas, exigibles e impagadas (muchas de ellas sustanciándose mediante procesos judiciales), Fergo Aisa obtuvo oxígeno de los bancos mediante la novación de un crédito por valor de 84,1 millones de euros. Esa prórroga estaba sujeta, sin embargo, a diversas condiciones: la más importante era que antes del 30 de junio pasado se produjera una aportación de fondos mínima de 23 millones de euros.

Esa inyección de capital podía hacerse mediante aportaciones dinerarias, deuda subordinada y, a la vez, obligaba a Fergo Aisa a refinanciar otras deudas bilaterales que la compañía mantenía con terceros. “Esa refinanciación está ultimada al 96%”, asegura Antoni Bosch, director de planificación estratégica y nuevos proyectos.

Desde que se produjeron los cambios en el accionariado, Fergo Aisa ha refinanciado unos 330 millones de euros, según señala su directivo. El nuevo préstamo tiene una vigencia de nueve años, los cuatro primeros de carencia.

Ampliación de capital cubierta parcialmente

El informe del auditor, sin embargo, alerta a los accionistas de que a final de julio la empresa sólo había obtenido 5,2 millones de euros por medio de una ampliación de capital. El propio auditor señala la única vía que permite albergar esperanzas sobre la continuidad de la sociedad inmobiliaria: Fergo Aisa está negociando con los bancos que le amplíen hasta final de octubre próximo el plazo que vencía en junio. “Se está trabajando la prórroga con la banca y hay acuerdo. Si los bancos no estuvieran de acuerdo nos habrían ejecutado la deuda”, aclara Bosch.

La refinanciación no es el único problema a salvar de la constructora domiciliada en el Paseo de Gràcia. La propia auditoria mantiene otra salvedad sobre las cuentas. Se trata de la referida a las dudas sobre si podrán ser recuperados los saldos que adeudan otras sociedades del grupo (135 millones de euros) y los avales prestados a empresas vinculadas ante la banca, que totalizan otros 86 millones.

Stock de suelo

Los auditores que han examinado los estados contables del grupo ya señalaron en un informe anterior dudas sobre el valor de las existencias de la empresa, que están compuestas básicamente por activos inmobiliarios, dada la situación del mercado y la valoración de los inmuebles presentada por Fergo Aisa. En el último informe, el auditor explica a los accionistas que la dirección de la sociedad “no nos ha podido facilitar ninguna información adicional al respecto, por lo que se mantiene dicha incertidumbre a la fecha actual”.

No obstante, el directivo consultado por Economía Digital mantiene que el stock de suelo que mantiene el grupo permitirá acometer proyectos futuros de gran rentabilidad para el holding y que las observaciones realizadas por los auditores son comunes a todo el sector y responden únicamente a que no se han realizado nuevas tasaciones de los activos diferentes de las presentadas el ejercicio anterior. La cartera de suelo de Fergo Aisa está compuesta básicamente por terrenos rústicos, lo que hace más difícil su venta para obtener liquidez, pero que a cambio ofrece una rentabilidad superior.

Pese a la reconversión financiera que la sociedad ha llevado a cabo en los últimos meses, las pérdidas continúan marcando la línea de la cuenta de resultados. En los primeros seis meses del año, Fergo Aisa presentó unas pérdidas de 1,8 millones de euros. En ese mismo periodo, Bosch destaca que se ha mejorado de manera notable el resultado de explotación con cambios en la gestión y nuevos proyectos que permitirán mejorar a corto y medio plazo la situación de la compañía heredada de la etapa anterior.

Accionariado diverso
El primer accionista de Fergo Aisa es Carlos Fernández Gómez con casi el 30% de las acciones, según el registro de la CNMV. Tras los cambios en la composición accionarial, también forma parte del consejo el abogado barcelonés José Luis Gomáriz (artífice del acuerdo que dio lugar a la fusión). Todavía mantiene una participación Genís Marfà, quien lideró la etapa anterior de Aisa. Su tío Jordi Parpal, ex alto cargo del PSC en el Ayuntamiento de Barcelona y conocido urbanista que tuvo su punto álgido en los prolegómenos de los Juegos Olímpicos de Barcelona, representa sus intereses en el consejo.

Recibe nuestra newsletter diaria

O síguenos en nuestro  canal de Whatsapp