El coronavirus se lleva por delante al AVE ‘low cost’ de Renfe

José Luis Ábalos asume que "con las distancias de seguridad va a ser complicado" retomar el AVLO "en el corto plazo de tiempo"

Una de las ventajas más destacadas de Avlo es su atractivo precio.

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El coronavirus se lleva por delante al AVLO, el AVE de bajo coste que impulsa Renfe ante la liberalización de la alta velocidad en España. La delicada situación económica que ha generado la pandemia deja este proyecto en el aire, al menos al corto plazo, por las nuevas restricciones de viajes basadas en la limitación de la movilidad y el distanciamiento social.

El ministro de Transportes y Movilidad, José Luis Ábalos, ha informado de esta suspensión, puesto que «con las distancias de seguridad que se plantean va a ser complicado«: «No veo que podemos plantear un servicio low cost en el corto plazo de tiempo».

El Gobierno preveía poner en marcha AVLO a principios del pasado mes de abril, algo que la enfermedad llevó por delante. En el momento de la suspensión, la operadora había vendido ya una tercera parte de la oferta inicial de plazas del nuevo servicio. En concreto, se habían despachado 146.389 plazas, el 28% de las 522.000 que inicialmente había puesto a la venta.

Este número incluye las 16.000 que se vendieron a 5 euros a través de la iniciativa promocional que la operadora lanzó a finales de enero con ocasión de la puesta en venta del servicio. La operadora tuvo que proceder por tanto a devolver el importe de los billetes que ya había vendido para este nuevo servicio.

La oferta que la operadora pública había diseñado para el AVLO contemplaba que el billete costaría entre 10 y 60 euros en función del horario y la demanda. A este importe está previsto que se sumaran suplementos en el caso de que el viajero solicite determinadas prestaciones, como es elegir un asiento concreto o llevar una segunda maleta.

Parálisis en Barajas y El Prat

Ábalos también ha enfriado los proyectos de ampliación de los aeropuertos de Madrid y de Barcelona, cuya fecha de inicio podría dilatarse hasta 2022. El ministro ha explicado que la caída en el volumen de viajeros puede llevar a que el plazo de inicio se dilate, pese a que Aena considera que «seguirán siendo necesarias«. 

El Gobierno cree que pese a la considerable disminución de la actividad de Aena, que ha sido casi total, y de algunas previsiones que apuntan a que la recuperación de los niveles de tráfico aéreo del año pasado, no se producirá hasta 2022 o, incluso, 2023, el gestor aeroportuario mantiene vigentes sus compromisos de inversión del primer periodo DORA 2017-2021.

 

 

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