Un viaje al modernismo por el interior de Tarragona

Si pensamos en el Modernismo hay una ciudad que inmediatamente viene a la mente: Barcelona es su capital indiscutible debido a la gran cantidad de edificios, templos y residencias diseñadas bajo los patrones este estilo.

Sin embargo el Modernismo, representante de la bonanza económica de Cataluña entre fines del siglo XIX y principios del XX, también tuvo un campo fértil en la Costa Dorada y las comarcas interiores de la provincia de Tarragona.

De hecho en esta zona hay documentadas más de 600 edificios modernistas en alrededor de 100 municipios.

Y no siempre son viviendas: edificios públicos, sedes de cooperativas, iglesias, parques y hasta bodegas fueron diseñadas por las grandes figuras de este movimiento.

Reus, Gaudí y Domènech

Por supuesto que el primer nombre que viene a la cabeza si se habla de Modernismo es Antoni Gaudí.

En la Costa Daurada y el interior de Tarragona hay más de 600 obras modernistas registradas

El creador de la Sagrada Familia nació en Reus, capital de la comarca de Baix Camp. En su plaza central se encuentra el Gaudí Centre, que por medio de tecnologías interactivas permite conocer su vida y obra; en una ciudad donde se pueden ver una treintena de edificios de esa corriente arquitectónica como las casas Navàs, Rull y Gasull (diseñadas por Lluís Domènech i Muntaner), el Institut Pere Mata, la escuela Prat de la Riba y la Estación Enológica, entre otros.

Modernismo en Cambrils y Selva de Camp

No muy lejos está Cambrils, ya en plena Costa Dorada, donde se puede pasear por el Parque Samà, que en sus 14 hectáreas concentra 1.500 especies de flora y fauna. Excepto el palacio de Salvador Samà i Torrens el resto del conjunto fue diseñado por Josep Fontserè i Mestre, autor del Parque de la Ciutadella de Barcelona.

Otra obra emblemática de Domènech i Muntaner es el hotel-monumento Mas Passamaner, en Selva de Camp, un lujoso establecimiento de cinco estrellas que conserva la elegancia que imprimió ese arquitecto un siglo atrás.

Las catedrales del vino

Diseminadas entre viñedos y pueblos en las comarcas de Tarragona hay numerosas bodegas diseñadas bajo la huella del Modernismo, donde destaca el nombre de César Martinell, autor de 50 proyectos en la región.

Este arquitecto firmó las construcciones de los cellers del Sindicato Agrícola de Nulles (Alt Camp), la de la Cooperativa de Falset (en el Priorat), la de Pinell de Brai, la de Gandesa y la de Montblanc, entre otras.

Pero también vale la pena conocer los edificios de las bodegas agrícolas de L’Esplugar de Francolí y Sarral (actual bodega Portell), en la Conca de Barberà, autoría de Pere Domènech.

Si todavía se está en el Priorat, se sugiere una escapada a la Casa de las Minas, edificio de 1905 que se combina con una visita al Museo de Minas de Bellmunt.

Las obras de Jujol

Una agradable sorpresa espera en Montferri, en Alt Camp, donde entre viñedos emerge la silueta de la iglesia modernista de Nuestra Señora de Montserrat, diseñada por Josep Maria Jujol en 1925 (y finalizada en 1999).

Este arquitecto, discípulo de Gaudí, “fue uno de los arquitectos más prolíficos del Modernismo en la Costa Dorada”, precisan en el área de turismo.

Tarragona tiene más de 50 creaciones modernistas, desde teatros y mercados hasta numerosas residencias de familias aristocráticas y burguesas

En la ciudad de Tarragona, por ejemplo, diseñó el Teatro Metropol (atención a la forma de barco, como si llevara al público “al mar de la salvación”) y el edificio del Mercado Central.

En la capital también se encuentra una de las pocas obras de Gaudí en esta provincia, El manifestador del Santuario de Nuestra Señora del Sagrat Cor. Y hay 50 más para descubrir en un largo paseo por su casco histórico y el Nou Eixample.

En Salou y el Baix Penedès

A lo largo del paseo marítimo de Salou, desde el centro hacia el sur, varios indianos recurrieron a arquitectos modernistas para levantar sus fastuosas residencias, como se ve en los chalets Bonet, Loperena, Miarnau, Torremar (sede del Patronato de Turismo local) y la Villa Enriqueta.

Ya en las tierras del Baix Penedès, en El Vendrell, está la Casa Benvingut Socias; mientras que en L’Arboç se puede conocer la Giralda de l’Arboç, que tiene una curiosa hermandad con la Giralda de Sevilla.