El Banco de España retrasa a 2023 la recuperación de las empresas

Según el organismo, la capacidad de endeudamiento determinará el futuro de cada compañía. El patrimonio neto de las empresas ha descendido un 25% respecto a 2019

El Banco de España retrasa a 2023 la recuperación de las empresas.

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La pandemia, además de trastocar todo el sistema sanitario, ha provocado un gran parón de la economía en España y a nivel global. Un año y medio después, el Banco de España calcula que la crisis iniciada en 2020 ha tenido consecuencias directas sobre el patrimonio neto de los negocios.

En concreto, ha descendido un 25%, respecto a la situación prepandémica. Los sectores más dañados han sido el turismo, el comercio y el transporte, que han llegado a situarse en un 34%.

Este índice es negativo cuando las pérdidas superan a la suma del capital social. Por tanto, las reservas de cada empresa son las que determinan la viabilidad de cada una. El Banco de España señala, en este sentido, que la capacidad de endeudamiento determinará el futuro de cada compañía.

La recuperación empresarial se retrasa

El Gobierno y muchos expertos vaticinan una recuperación para este mismo ejercicio, aunque en el caso de las empresas, el Banco de España prevé que “no sería hasta 2023” cuando “la empresa mediana recupere los niveles de rentabilidad de antes de la pandemia”. 

Un pronóstico que se producirá si se dan las buenas circunstancias. En caso contrario, los índices negativos se mantendrían tanto este año como el siguiente, retrasando la recuperación. Es la conclusión del Banco de España en un análisis de Roberto Blanco, Sergio MayordomoÁlvaro Menéndez y Maristela Murino.

Las pymes, las más afectadas

Los autores afirman que la deuda de las empresas se encuentra entre los 9.000 millones y los 18.600 millones de euros. Gran parte de esta cantidad corresponde a las pymes, que son las grandes afectadas por la crisis.

La pandemia se ha traducido en un «un deterioro de su situación de solvencia» para las empresas

Una de las conclusiones que extraen los expertos es que la pandemia ha provocado «un deterioro de su situación de solvencia». Además, para 2023 se estima que las empresas sobreendeudadas mantendrán una rentabilidad positiva, pero el endeudamiento crecerá hasta 4,7 puntos como consecuencia de la covid.

Mientras, las compañías sobreendeudadas (en su mayoría, pymes) no tienen un futuro tan favorable, ya que cerrarán el 2023 con resultados corrientes negativos. Además, se espera que aumenten las empresas vulnerables y que peligrará su viabilidad.

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