El Partido Popular tiene un problema con Intereconomía, y vicecersa. La llegada de Mariano Rajoy a la Moncloa ha venido acompañada con la directriz de bajar el soufle comunicativo: el Gobierno, dada las duras medidas que deberá tomar, no quiere un ambiente crispado ni que, en resumen, se agite a las masas con las contrarreformas sociales para contentar al electorado más conservador.
Por ello, a la recomendación de no acudir a los programas de tertulia en la TDT dada a sus miembros, se unen algunas sugerencias para que los medios próximos ideológicamente vistan ahora un perfil más moderado.
El partido gobernante considera que algunos directivos del grupo Interconomía no encajan en este nuevo ambiente comunicativo y se habría pedido a Julio Ariza –presidente del grupo– un papel más discreto para ellos en la cúpula directiva. En la lista de nombres a reubicar figura el de Xavier Horcajo. El periodista catalán, que antes había desarrollado su carrera en medios de corte progresista, es ahora un problema para el PP por extremista.
En la cadena, además, se plantean renombrar programas como Dando caña pensados adhoc para emitirse durante el Gobierno Zapatero.
