El gurú gallego de la moda que apuntala el imperio catalán Puig
Un ex vicepresidente de Inditex es ahora uno de los grandes apoyos de Marc Puig en el consejo de la firma
José María Castellano ha ocupado cargos de responsabilidad en varias compañías, pero su gran despegue fue en Inditex, como socio de Amancio Ortega para la expansión de la compañía en los 90. Llegó a ocupar la vicepresidencia hasta su salida, en 1997, por discrepancias con el multimillonario dueño de Zara.
Después de dejar la moda unos años y de su paso por ONO, de la que fue presidente, y Novagalicia, Castellano vuelve a estar metido de lleno en el sector, y como puntal de una importante firma catalana: es uno de los miembros más estables del consejo de Puig, que desde hace algo más de un año es segundo accionista de dos grandes del textil gallego, Lonia y Adolfo Domínguez.
Castellano aterrizó en el consejo de Puig en octubre de 2014, solo un mes después de que el grupo catalán se hiciera con el paquete del 25% de la Sociedad Textil Lonia que los franceses de LVMH habían puesto a la venta.
Lonia, de los hermanos de Adolfo Domínguez, es hoy en día el segundo grupo textil gallego, solo por detrás de Inditex, y fabrica y comercializa marcas como Carolina Herrera, CH y Purificación García. Puig también es franquiciado de la diseñadora venezolana afincada en Nueva York, en su caso para su división de perfumería.
La aportación de Castellano
Cuando Castellano se incorporó a Puig solo hacía tres meses de su despedida de Novagalicia, donde había asumido tareas de transición en por encargo del Fondo de Reestructuración Ordenada de la Banca (FROB).
Puig es desde 2014 el segunda accionista de dos de las mayores compañías textiles de Galicia tras Inditex: Adolfo Domínguez y Textil Lonia. De la primera tiene un 14,8% de su capital, y a su accionariado se había incorporado mucho antes, en el año 2000. De la segunda, el 25%.
La relación con Adolfo Domínguez
Y si «Caste» está ahora en el consejo de Puig, como antes en otros órganos de administración, también tuvo presencia en el sector textil gallego tras su salida de Inditex, del que ocupó durante años la vicepresidencia.
Y fue precisamente Adolfo Domínguez quien llamó a la puerta del catedrático coruñés para incorporarlo a su consejo. Sucedió en marzo de 2007. Solo estuvo dos años con el modisto ourensano. Cuando en 2009 accedió a la presidencia de ONO, el ejecutivo coruñés dejó el consejo de Adolfo Domínguez.
Puig es uno de los grandes del lujo. En 2015 alcanzó unas ventas netas de 1.645 millones de euros, representando un crecimiento del 9%. El beneficio neto atribuido fue de 126 millones de euros, un 8% de las ventas. El 14% de sus ventas se generan en España y el 86% en el resto del mundo.
La multinacional que preside Marc Puig contaba en 2015 con 4.483 empleados, de los cuales 1.620 trabajaban en España. En la actualidad, Puig vende sus productos en más de 150 países y cuenta con filiales propias en más de una veintena de países.
