Esta casa prefabricada puede durar 100 años y cuesta menos de 50.000 euros
Las casas prefabricadas de la compañía Zome fabrica casas con materiales resistentes al fuego, la nieve, el moho, el agua y las plagas
Dado que la superficie y el volumen de los módulos son más reducidos, se puede aislar térmicamente de forma más fácil. Foto: Zome.
A pesar de que puede parecer que las casas prefabricadas duran menos que las tradicionales, este tipo de viviendas pueden perdurar durante décadas.
Un claro ejemplo son los modelos que comercializa la compañía estadounidense Zome, construidos con placas de biocerámica, una material resistente al fuego, la nieve, el moho, el agua y las plagas.
Modelos geométricos y resistentes
Según explica la compañía, se trata de una estructura resistente que exige poco mantenimiento, por lo que puede resistir al desgaste continuo «durante toda la vida».
Los modelos están conformados por una geometría de zonoedros polares y ocupan dos tercios de la superficie de una casa tradicional.
Dado que la superficie es más reducida y el volumen de la vivienda es más pequeño, es más fácil de aislar térmicamente y de mantener la temperatura.
Las distintas casas prefabricadas que comercializa la compañía están pensadas para convertirse en una pequeña casa, una oficina, un estudio de arte, dormitorio de invitados, un gimnasio o un salón de yoga.
Materiales reciclables
Los materiales empleados para fabricar los módulos son reciclables. Muestra de ello son las placas de biocerámica, elaboradas con magnesio y sílice, dos materiales que permiten crear un polímero con propiedades similares al cemento, pero más moldeable.
La empresa utiliza lana de roca, madera de abeto de Douglas y aislamiento de celulosa en sus viviendas
Si se pone el foco sobre las paredes, la empresa utiliza aislamiento de celulosa, un material que proporciona calefacción solar pasiva, absorbiendo el calor durante el día y distribuyéndolo por la casa al caer la noche.
Asimismo se emplea lana de roca, que brinda aislamiento sonoro y térmico, así como madera de abeto de Douglas, una especie de conífera de hoja perenne de la familia de los pinos, conocida por su fuerza, dureza y durabilidad.
Una rápida construcción
Los distintos módulos están diseñados para ser ensamblados de fácilmente por el equipo de constructores de la empresa en un periodo máximo de cuatro semanas.
De hecho, según indica la empresa, el montaje de las viviendas se lleva a cabo sin grúa, herramientas especiales, ni pegamento, según indica la empresa.
Casas prefabricadas a partir de 33.000 euros
El modelo más económico es el que cuenta con las dimensiones más reducidas, de 30 metros cuadrados, y tiene un precio de 33.000 euros. Con esta opción, la persona interesada ha de asumir más responsabilidad en el ensamblaje, puesto que ha de encargarse de la colocación de los cimientos.
Por el precio de 212.000 euros, se puede adquirir el modelo con una superficie de 167 metros cuadrados. Cuenta con una habitación, un lavabo y una cocina. Dentro del precio se incluye tanto el envío, como la instalación de la casa, los cimientos, la electricidad, la climatización, la cocina y el lavabo.
Por último, el modelo más amplio cuenta con una superficie de 243 metros cuadrados y un precio de 282.000 euros. La vivienda dispone de dos habitaciones, un lavabo y una cocina. En el precio también se incluye el envío, la instalación de los cimientos, la electricidad, la climatización, la cocina y el lavabo.
