La Caixa avisa a Rajoy y Mas que su actitud perjudica a la economía catalana

Un informe de la entidad destaca que los "puntos de conflicto" detraen recursos y energía para superar la crisis

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Las desavenencias entre el gobierno de Mariano Rajoy (PP) y la Generalitat de Catalunya de Artur Mas (CiU) lastran la economía. Su resolución «podría conllevar una liberación de energía colectiva y recursos materiales que se podrían enfocar a la solución de los problemas prioritarios en el plano económico», según un informe de La Caixa.

El documento, titulado La economía de Catalunya: diagnóstico estratégico, señala que La Caixa no se identifica necesariamente con las opiniones reflejadas en el texto, que atribuye exclusivamente a sus autores. Estos son los analistas Pablo Alonso, Ana Ramos, María Romero y Diego Vizcaíno (coordinador), bajo la dirección técnica de José Antonio Herce.

Puntos de conflicto

El informe, con datos de 2012, señala como principales «puntos de conflicto» los recursos de inconstitucionalidad que recibió el último Estatut, así como el déficit fiscal catalán, focalizado en el debate sobre el pacto fiscal.

Más allá de las limitaciones legales de implantar un modelo bilateral de financiación para Catalunya, que podría requerir cambios en el Estatut y la Constitución, el texto constata «un amplio consenso entre los principales actores institucionales, sociales y empresariales catalanes sobre la necesidad de mejorar la financiación», que afecte a los servicios públicos y favorezca el desarrollo económico y la competitividad de Catalunya.

Puntos débiles de Catalunya

El documento también alerta de que las dificultades económicas actuales «podrían impedir una financiación adecuada» de las infraestructuras catalanas y poner en riesgo su inserción en las redes europeas.

La falta de una aerolínea de referencia con conexiones globales en el Aeropuerto de Barcelona también dificulta la competencia aeroportuaria, especialmente ante Madrid-Barajas, en el sur de Europa. Otra debilidad de la economía catalana es el pequeño tamaño de sus empresas, que necesitan «ganar escala» para competir en el mercado global.

Desde otro observatorio, en este caso su boletín mensual sobre la situación económica, la entidad catalana anticipa la recuperación de la zona del euro. Advierte, sin embargo, sobre la vulnerabilidad de los países periféricos, como España.

Ismael García Villarejo

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