Podemos cuestiona al Tribunal de Cuentas tras rechazar los avales del Govern

Unidas Podemos se ha alineado con las formaciones independentistas en su batalla particular contra el Tribunal de Cuentas. La formación morada ha calificado como ilegítimas las deliberaciones del organismo fiscalizador, después de que haya rechazado los avales presentados por la Generalitat para cubrir la fianza de 5,4 millones de euros impuesta a 34 antiguos dirigentes.

«Cualquier decisión que tome este tribunal, tan cuestionado, con un mandato caducado, es una decisión cargada de ilegitimidad», ha afirmado el presidente del grupo de Unidas Podemos en el Congreso, Jaume Asens, durante los actos del 81 aniversario del fusilamiento de Lluís Companys.

El líder de los morados ha justificado sus declaraciones debido a que el Tribunal de Cuentas continúa trabajando en funciones por la falta de acuerdo político que ha impedido su renovación en los últimos meses. Ante esta situación, se ha comprometido a impulsar una reforma de su funcionamiento, así como a participar en la renovación de sus miembros.

Sus críticas se producen justo un día después de que el socialistas y populares anunciaran un gran pacto para renovar los órganos constitucionales que habían caducado su mandato, a excepción del Consejo General del Poder Judicial. El Tribunal de Cuentas es una de las instituciones que se han comprometido a desbloquear, aunque aún no se han anunciado los nombres de sus nuevos dirigentes.

Unidas Podemos se alinea con Junts y ERC

Las palabras de Asens han colocado a Unidas Podemos junto a Esquerra Republicana y Junts. Las dos formaciones independentistas han iniciado una campaña mediática para arremeter contra el Tribunal de Cuentas por haberse negado a aceptar el dinero de la Generalitat para compensar el desvío de fondos para la promoción del ‘procés’ en el extranjero.

La decisión pone en juego las finanzas personales de algunos pilares del secesionismo como Artur Mas, Carles Puigdemont o Oriol Junqueras. El líder de Esquerra Republicana ya tildado el rechazo de  «inhumano y antidemocrático» porque afectará directamente a sus familias, aunque ha admitido que lo afrontará de igual manera que su encarcelamiento.

La crisis de los avales ha supuesto una brecha en las negociaciones que se habían abierto en el seno de la mesa de diálogo. Ahora, el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ha advertido que habrá nuevos movimientos. «Es el momento también de combatir este nuevo ataque con todos los recursos legales y la máxima solidaridad colectiva. También con la máxima ambición nacional», ha clamado.

Otra de las figuras que ha cargado con fuerza contra el organismo fiscalizador e la presidenta del Parlament, Laura Borrás, que ve en el movimiento un síntoma más de la represión del Estado. «España persevera en no querer ser un estado de pleno derecho», ha asegurado la dirigente de Junts.

El PSC se mantiene al margen del debate

A diferencia de Unidas Podemos, el PSOE sí que ha decidido mantenerse al margen del debate político derivado de la decisión del Tribunal de Cuentas. El líder de los socialistas catalanes, Salvador Illa, no ha querido entrar en el fondo del asunto pero ha mostrado su «máximo respeto» por las deliberaciones de la institución.

«El Tribunal de Cuentas ha tomado una decisiones que debemos respetar», ha afirmado.

Sus declaraciones se producen un día después de que su formación haya logrado desbloquear la renovación de los cargos de los principales órganos del país con el Partido Popular, lo que también favorecerá el relevo de otras instituciones como el Tribunal Constitucional que ha tenido también un gran protagonismo en los asuntos judiciales del ‘procés’.