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Claves para atender un imprevisto de salud

Los préstamos personales de salud son una alternativa para financiar necesidades médicas o de salud en la medicina privada, en momentos puntuales

A nadie le gusta ponerse enfermo, tener un percance o sufrir un problema de salud. Sin embargo ocurre, y en ocasiones puede tratarse de un problema que requiera solución urgente. Las listas de espera en la Seguridad Social pueden significar una espera de meses. En otras ocasiones, el problema puede no estar cubierto por la Seguridad Social.

Así ocurre, por ejemplo, con las ortodoncias o los implantes dentales, o algunas operaciones oftalmológicas, como las que sirven para corregir la miopía o la hipermetropía. También con algunos tratamientos de fisioterapia. Si no tenemos un seguro privado o este no cubre nuestra necesidad, ¿qué podemos hacer?

Los préstamos personales de salud son una alternativa para financiar la atención de necesidades médicas o de salud mediante la medicina privada en momentos puntuales. Lo más importante: permiten solucionar ese problema de salud de forma rápida.

Con estos préstamos especiales, podemos obtener la cantidad necesaria para cubrir gastos médicos de cualquier miembro de la familia, y devolverla de forma cómoda mediante un pago mensual.

Se trata de un préstamo personal, con las características habituales de este producto financiero: la entidad financiera entrega una cantidad de dinero (principal) al prestatario, y este asume la obligación de devolver el principal y abonar además unos intereses pactados y los gastos derivados de la operación.

Características del préstamo de salud

Sin embargo, algunas entidades ofrecen un tipo especial de préstamos personales, enfocados a los gastos de salud, lo que permite optimizar sus ventajas. Los préstamos personales de salud de Cetelem son un ejemplo. 

Una ventaja importante es que puede solicitarse sin necesidad de cambiar de banco, y en apenas unos minutos, de modo que permite resolver los contratiempos médicos con la urgencia que se necesita.

Este préstamo se puede financiar en hasta en 96 meses (es decir, se puede devolver hasta en ocho años), si el importe que se solicita es igual o mayor a 10.000 euros. Si es inferior a esa cantidad, puede pagarse hasta en 60 meses (cinco años).

Para garantizar la transparencia, la web permite simular el préstamo para gastos médicos, y conocer con certeza cuál es la cuota a pagar cada mes, dado que varía en función de la cantidad solicitada y el plazo pactado.

Intervenciones odontológicas o de estética

Este tipo de préstamo permite financiar intervenciones, tratamientos u operaciones en la sanidad privada o aquellos servicios que exijan el copago. La lista de intervenciones es amplia: tratamientos psicológicos, odontológicos, pediátricos, estéticos o de emergencias. De esta forma, facilita el acceso a muchas personas que, sin esta aportación financiera, quizá no emprenderían un tratamiento que va a ser muy beneficioso para su salud.

Este puede ser el caso, por ejemplo, de una intervención odontológica como la de poner brackets. Para muchos, esto supone una inversión que no pueden permitirse de golpe. Sin embargo, el acceso a financiación puede cambiar esta perspectiva.

Lo mismo ocurre con una intervención estética: quizá haya muchas personas que no la realicen por no disponer de la cantidad necesaria, pero un préstamo de este tipo puede permitirles acceder a este servicio, con lo que ganarán en autoestima y seguridad.

En definitiva, los préstamos personales de salud sirven para que, cuando hay una emergencia o una necesidad no cubierta, podamos garantizarnos el acceso a un servicio médico. Pocas cosas más importantes que esa.