Caixabank supera al Santander en reclamaciones tras la fusión con Bankia

Un 23,4% de las quejas que recibió el Banco de España en 2020 iban dirigidas a Caixabank y Bankia, una cifra superior al resto de bancos

Una oficina de Caixabank, cuya fusión con Bankia ha desencadenado la pérdida de más empleos en el sector bancario

Una oficina de Caixabank.

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Caixabank se convierte en la entidad que más reclamaciones recibió en 2020 en el Banco de España si se tienen en cuenta los datos de Bankia, entidad con la que se ha fusionado. Según las cifras publicadas este martes por el regulador en la `Memoria de Reclamaciones´, el año pasado admitió 21.320 reclamaciones de clientes afectados por algún producto financiero. 

De estas, un 23,4% iban dirigidas a la nueva Caixabank (casi 5.000). En concreto, 2.696 a la entidad catalana y 2.301 a Bankia. Pero también Caixabank Payments & Consumer, la financiera del grupo, recibió otras 385, lo que eleva esta cifra aún más.   

Sin la fusión de estos dos bancos, el Santander sería la entidad que más reclamaciones recibió en 2020. La entidad que preside Ana Botín tuvo 3.849 quejas. Le sigue BBVA, con 2.405; Banc Sabadell con 1.091 y Wizink 1.035.  

Solo estas entidades reúnen el 62,7% del total de reclamaciones. Le siguen en la lista, Ibercaja, Abanca, Unicaja e ING con más de 600 cada una.  

La nueva Unicaja (que surgirá de la fusión con Liberbank, algo que ocurrirá previsiblemente este mes de julio) también acumula 1.146 reclamaciones. Si mantiene estos datos, subirá escalones en el informe del siguiente año.  

Las materias en las que el BdE ha tramitado un mayor número de reclamaciones han sido préstamos hipotecarios, depósitos a la vista y tarjetas.  

Fachada de la sede del Banco de España. EFE/J.J. Guillén/Archivo
Fachada de la sede del Banco de España. EFE/J.J. Guillén/Archivo

La memoria pone de relieve que el Banco de España ha tenido conocimiento de la devolución de más de 3 millones de euros por parte de las entidades a sus clientes con motivo de la rectificación de sus actuaciones, tanto antes como después del informe final.  

Esta es la cifra más alta en una década. Sin embargo, el importe medio devuelto por cada reclamación resuelta ha descendido ligeramente con respecto al año precedente. En concreto fue de 431,74 euros, frente a los 455,29 euros de media que se devolvieron en 2019.  

El organismo que dirige Pablo Hernández de Cos también informa de que en 2020, el total de reclamaciones ha aumentado un 45,6% respecto a 2019. Y es que en solo un año, el Santander ha recibido 1.623 más, pasando de 2.226 quejas en 2019 a 3.849 en 2020.  

Las reclamaciones a Wizink se disparan por encima del 50%

Una tendencia que se repite en todas las demás entidades, así en Caixabank también han pasado de 1.996 a 2.696; en BBVA de 1.973 a 2.405; en Bankia de 1.451 a 2.301; y en Banc Sabadell han subido de 803 a 1.091.  

Aunque el aumento más significativo es el de Wizink, elevándose en más de un 50% al pasar de 461 reclamaciones en 2019 a 1.035 en 2020. La entidad se ha visto principalmente afectada por las novedades regulatorias en la comercialización y transparencia de las tarjetas revolving

Si bien, en marzo de 2020, el Tribunal Supremo condenó a la entidad al considerar usurario el tipo de interés de un crédito ligado a una de sus tarjetas revolving, que llegó a alcanzar el 27,24% de interés. Y desde entonces las reclamaciones a esta entidad y a todas las que comercializan estas tarjetas se han disparado. 

De hecho, la Memoria destaca que en general, las reclamaciones por tarjetas revolving han aumentado en un 212% durante el año pasado.  

El revés judicial del pasado año llevó a Caixabank a realizar una provisión de 468 millones de euros por las obligaciones que pudieran derivarse de procedimientos judiciales, incluidos los relativos a tarjetas revolving o con pagos aplazados, pero no todos. Según explicaba en su último informe anual.  

Y es que, además de esta sentencia, que afecta a todo el sector, CaixaBank y su filial de tarjetas, CaixaBank Payments and Consumer, recibieron una acción colectiva por parte de la asociación de consumidores Asufin. 

Pese a ello, Wizink es a toda la luz la entidad más afectada. Antes de la sentencia tuvo que provisionar más de 200 millones de euros y a cierre de 2020 había consumido más de 60 millones de euros. 

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