Conjura empresarial para ampliar el aeropuerto de Barcelona: objetivo, convencer a Aragonès

Más de 200 organizaciones presionan a la Generalitat de Catalunya para que facilite la prolongación de una de las pistas

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Tres meses después de la exhibición de unidad contra los disturbios provocados por la condena al rapero Pablo Hasél, el empresariado catalán vuelve a organizar un acto de fuerza dirigido a la Generalitat de Catalunya. Si en marzo fue para que pusiera fin al vandalismo y se focalizase en la recuperación de la crisis del coronavirus, ahora el mensaje se centra en pedir al Ejecutivo catalán que facilite la ampliación del aeropuerto de Barcelona-El Prat.

En un acto organizado en la escuela de negocios barcelonesa Esade, las principales patronales y organizaciones empresariales del territorio pedirán al govern recién formado por Pere Aragonès que impulse la prolongación de la tercera pista y la creación de una terminal satélite en la instalación catalana. Se lo dirán directamente al conseller de Políticas Digitales, Infraestructuras y Agenda Urbana, Jordi Puigneró, que representará a la administración en el evento.

Ahora, Foment del Treball, Pimec, la Cámara de Comercio de Barcelona y el Círculo de Economía lideran un manifiesto de hasta 200 instituciones que exigen la ampliación ante los titubeos o la negativa –com es el caso del Ayuntamiento de Barcelona— políticos de la operación.

«Las entidades signatarias de este manifiesto, reclamamos el acuerdo entre Aena, la Generalitat, el área Metropolitana de Barcelona, y los Ayuntamientos de Barcelona, El Prat, Gavà, Viladecans, Sant Boi», señala el documento hecho público el viernes. La decisión se tomará en Bruselas; los terrenos afectados dentro del complejo natural del Delta del río Llobregat están protegidos dentro de la Red Natura 2000, que cuenta con la máxima protección y cuya recalificación depende de la Unión Europea.

“La cifra de casi 53 millones de viajeros registrados en 2019 se acercó a su capacidad máxima de 55 millones”, avisan las entidades organizadoras. “Solo la reducción de la actividad económica, de los movimientos de las personas y de los vuelos generada por la pandemia ha dado una no deseada tregua que, afortunadamente, parece estar llegando a su fin. Ahora de lo que se trata es que el Aeropuerto de Barcelona-El Prat, a través de su última ampliación, contribuya a la recuperación económica de Cataluña y a su crecimiento”.

Las dudas de la administración

El mensaje del empresariado se dirige principalmente al nuevo presidente de la Generalitat, Pere Aragonès. El dirigente eludió posicionarse este martes sobre la ampliación y señaló que proponía la creación de una mesa para abordar la cuestión. “No es una cuestión fácil, se necesita un aeropuerto competitivo pero también proteger la biodiversidad”, dijo tras la reunión del Consell Executiu. 

La mesa de trabajo la formarán todas las instituciones afectadas por esta potencial reforma, entre las que estarán Aena, el Gobierno, la Generalitat y los ayuntamientos afectados. La contraposición de ideas es compleja: mientras que la autoridad aeroportuaria apoya la reforma, Ada Colau ha mostrado su fuerte oposición a esta infraestructura.

Se da por hecho que la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, se opondrá con dureza a la ampliación. En la comisión de Ecología, Urbanismo y Movilidad del Consistorio se rechazó una propuesta para la obra con los votos en contra dels comuns y ERC y la abstención de JxCat. “Es antiguo hacer escoger entre ecología y economía”, defendió la concejal de Urbanismo de Colau, Janet Sanz.

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