Molins sufre la volatilidad de las divisas: recorta su beneficio hasta los 141 millones

Molins ha obtenido un beneficio neto de 141 millones de euros entre enero y septiembre de este año, una cifra que refleja un descenso del 8% en comparación con el año anterior. Entre los motivos esgrimidos por la firma para explicar este resultado se encuentra el impacto negativo de la depreciación del peso mexicano y argentino, que ha «neutralizado la mejora de los resultados operativos».

Más allá de España, la compañía tiene presencia en Argentina, México, Croacia, Turquía, Uruguay, Colombia, Bangladesh, Túnez y Bolivia. En Argentina opera a través de Cementos Avellaneda, mientras que en México lo hace mediante Cementos Moctezuma, ambas compañías participadas por Cementos Molins.

A lo largo de los nueve primeros meses del año, la compañía catalana también ha recortado un 2% la facturación hasta los 1.004 millones de euros y ha reducido un 4% el Ebitda, que se ha situado en los 263 millones de euros. Por su parte, el margen Ebitda se ha mantenido prácticamente estable, en torno al 26,2%.

Volatilidad del peso mexicano y argentino

El consejero delegado de Molins, Marcos Cela, ha puesto de relieve el «crecimiento sólido y sostenible» de la compañía en un contexto marcado por la volatilidad de las divisas y la aceleración económica. Tras destacar que las ventas a tipos de cambio constantes han aumentado un 7% y el resultado operativo ajustado por el efecto divisa ha crecido un 6%, ha considerado que esas cifras «demuestran la resiliencia y eficiencia» del modelo de negocio.

«La capacidad de Molins para identificar oportunidades de crecimiento en segmentos clave y en zonas estratégicas refuerza nuestra presencia en mercados de alto potencial y consolida una base sólida para el futuro», ha asegurado el CEO de Molins para después señalar: «Seguimos apoyándonos en una posición financiera sólida y en un equipo comprometido para impulsar un desarrollo sostenible y rentable a largo plazo».

Nuevas oportunidades de crecimiento

Molins ha destacado la reducción de la deuda financiera neta, que se encuentra en los 96 millones de euros, y ha asegurado que la «sólida posición financiera» refuerza su capacidad para impulsar nuevas oportunidades de crecimiento y avanzar en las inversiones vinculadas a su hoja de ruta de sostenibilidad 2030.

En este sentido, ha recordado que ha alcanzado uno de los objetivos marcados en su estrategia de sostenibilidad, al haber reducido la proporción de clinker por tonelada de cemento hasta el 67,7%, lo que implica una mejora del 4,2% respecto 2019.

Compra de Baupartner

Con el objetivo de impulsar el negocio de soluciones prefabricadas de hormigón en el sureste de Europa, la compañía anunció el pasado verano un acuerdo con Titan para materializar la compra conjunta de Baupartner, empresa especializada en el diseño, fabricación y montaje de este tipo de estructuras.

La empresa, que cuenta con una plantilla conformada por 300 profesionales, opera en Bosnia y Herzegovina, Croacia y Serbia. Con todo, la operación de compra se formalizó a finales de septiembre.

Vuelta a Cataluña

Cabe recordar que a finales del año pasado, el consejo de administración de la empresa cementera y de soluciones para la construcción Molins aprobó devolver su sede social a Cataluña tras situarla en Madrid en 2017, durante el proceso independentista.

En un comunicado remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), detalló que el nuevo domicilio social estará en su planta de Sant Vicenç dels Horts (Barcelona), en la carretera N-340.

Según reveló la compañía, la decisión se tomó de forma unánime dentro del consejo de administración pensando en «el mejor interés» para la firma.