Sabadell cerrará 320 oficinas y reducirá otras 176 a cajeros con el ERE

El banco quiere reducir en un 32% su red de oficinas y por eso 1.600 salidas del ERE afectarán a estos trabajadores

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Banc Sabadell ha propuesto a los sindicatos en la reunión celebrada este martes en Barcelona, el cierre de 32o oficinas y la conversión de otras 176 en cajas avanzadas. En total se verán afectadas 496 oficinas, que se suman a las 1.900 salidas ya anunciadas la semana pasada, en el marco del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que la entidad ha puesto en marcha para ahorrar 100 millones de euros en costes.

Este plan de ajuste afectará a 1.639 personas de la red de oficinas, el 86% del total y unas 260 de centros corporativos y servicios centrales, según fuentes sindicales. El banco defiende que el ERE se ha puesto en marcha porque hay regiones donde es necesario reducir plantilla. También, que no todas las salidas serán mediante prejubilaciones.

La entidad quiere fusionar las sucursales más pequeñas en otras más grandes y especializadas. El pasado mes de julio ya se iniciaron estos cambios, hubo 105 cierres y 9 conversiones a cajas avanzadas, estas funcionan únicamente con cajeros y servicios básicos. Habrá otros 215 cierres de sucursales en octubre, como adelantamos en Economía Digital.

Las regiones más afectadas tanto por cierre de oficinas como por salidas, serán Cataluña, el Levante (Alicante y Murcia, principalmente) y Madrid.

El banco catalán se ha reunido por segunda vez con la representación laboral en el contexto del periodo informal de negociación del ERE, que finaliza el día 14, y donde habrá otras dos reuniones más. En este tiempo, la representación laboral trata de buscar alternativas para evitarlo o minimizarlo.

Después empezará el periodo formal, y según los tiempos pactados, la negociación se debería cerrar el 21 de octubre. A continuación se abriría el periodo de adhesiones voluntarias, que dura un mes.  

Sabadell necesita el ERE para ser viable

El banco ha presentado en la reunión de hoy el informe técnico, donde justifica la necesidad de acometer un ERE para seguir siendo viable. Los sindicatos explican que deben estudiar estos datos para poder hacer una contrapropuesta, aunque siguen defendiendo que las salidas sean mediante prejubilaciones y bajas incentivadas, pero no forzosas.

Si los plazos no se alargan por falta de entendimiento, estas salidas podrían iniciarse a final de año, aunque el banco ya tenía programado que se efectúen durante enero y marzo de 2022. El consejero delegado del banco, adelantó en la última presentación de resultados que este plan ya está financiado y no tendrá impacto en el capital, ya que cuentan con hasta 1.000 millones de euros en plusvalías procedentes de la cartera Alco.

También aclaró que no será necesario utilizar todo este presupuesto, ya que en el anterior (donde salieron otras 1.800 personas) costó unos 300 millones.

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