Vodafone sin intenciones de vender a Telefónica: “La fiesta acaba de empezar”
La compra de Vodafone España por Zegona estuvo valorada en 5.000 millones de euros
La respuesta de Vodafone ante la propuesta de Marc Murtra
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Un año después de que el fondo británico Zegona adquiriera Vodafone España, la compañía analiza los planes de futuro y deja bien clara su postura sobre las fusiones que ha planteado Telefónica. Marc Murtra, presidente de la empresa desde enero, apuesta por la consolidación del sector europeo de las telecomunicaciones para fortalecer la autonomía estratégica frente a los gigantes tecnológicos de Estados Unidos y China.
Fue durante el Mobile World Congress 2025 cuando solicitó a la Unión Europea a facilitar fusiones que permitan crear operadores con mayor capacidad de competir globalmente y liderar en innovación tecnológica. Además, Murtra considera que la fragmentación actual y la rigidez regulatoria limitan la capacidad de inversión y desarrollo del sector en Europa.
Ante esta propuesta, Vodafone España se perfila como un posible objetivo para la estrategia de fusión que impulsa Marc Murtra. Sin embargo, tras el recorrido de este último año, el fondo Zegona no tiene intención de desprenderse de Vodafone. Eamonn O’Hare, presidente de fondo, ha dejado clara su intención de no vender nada a Telefónica: «La fiesta acaba de empezar y no queremos perdernos la diversión».
Ahora el objetivo de la compañía es mejorar el mercado mayorista: «Si tienes una red fija muy grande y solo utilizas el 20%, no estás optimizando tus valiosos activos. Es como dirigir una aerolínea con el 20% de los asientos o un hotel con el 20% de ocupación», confesó O´Hare en 2023, cuando el fondo británico anunció la oferta por Vodafone España.
La llegada de Zegona a Vodafone España
La adquisición de Vodafone España por parte del fondo británico Zegona se realizó hace un año, el 1 de junio de 2024. Esta operación marcó un hito en el sector de las telecomunicaciones. La operación estuvo valorada en 5.000 millones de euros e incluyó un pago inicial de 4.100 millones en efectivo y 900 millones en acciones preferentes reembolsables en un plazo de hasta seis años.
Fue el Gobierno de Pedro Sánchez quien autorizó la operación, destacando los compromisos de Zegona en mantener la continuidad del servicio, realizar inversiones en tecnología 5G y asegurar la solvencia financiera de la compañía. José Miguel García asumió el cargo de consejero delegado, quien cuenta con una consagrada trayectoria en el sector, pues lideró anteriormente la transformación de Euskaltel y Jazztel.
En términos operativos, la llegada de Zegona tuvo buenos resultados. Vodafone España logró revertir la pérdida de clientes, ganando 135.000 nuevas altas netas en banda ancha y móvil hasta septiembre de 2024. Este cambio se atribuye a una nueva política de tarifas más competitivas y simplificadas. Financieramente, refinanció 1.290 millones de euros de su deuda previa, reduciendo la tasa de interés del 4,25% al 3%.
Sin embargo, la reestructuración también tuvo consecuencias en el empleo. Zegona presentó un expediente de regulación de empleo (ERE) que afectó inicialmente a más de 1.000 empleados, cifra que posteriormente se redujo a 898 gracias a las negociaciones con los sindicatos. Además, se ofrecieron prejubilaciones a trabajadores mayores de 58 años con al menos 10 años de antigüedad.
