El Gobierno promete un gasto en sanidad como el de 2007

El Ejecutivo planea reforzar el Sistema Nacional de Salud aumentando la inversión hasta un 7% del PIB

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Los rebrotes de coronavirus se multiplican alrededor de España. Los primeros sucedieron en el País Vasco, en los hospitales de Basurto (Bilbao) y Txagorritxu (Vitoria); después aparecieron más en dos residencias privadas y un hospital de Valladolid sumando 26 contagios; en Girona (Cataluña) se localizaron 20 trabajadores contagiados en una industria agroalimentaria.

Mientras que, la policía de Algeciras (Cádiz) mantiene aislado un hostal de esta localidad tras detectar tres casos positivos y un fallecimiento por el virus. Estos casos suponen un verdadero reto para el Gobierno, por lo que ha decidido garantizar un sistema de salud preparado para poder hacer frente a los que todavía están por llegar. Sobretodo, teniendo en cuenta que quedan escasas 72 horas para entrar en la nueva normalidad.

El plan del Ejecutivo es reforzar el Sistema Nacional de Salud dotándolo de mayor financiación. Concretamente, el ministro de Sanidad Salvador Illa se ha comprometido este jueves a aumentar durante la legislatura la inversión en sanidad hasta llegar a niveles previos a la crisis económica del 2008, lo que supondrá una inversión del 7% del PIB en el sistema sanitario. Además, también se abordará con las comunidades una mejora en las condiciones de sus profesionales sanitarios

Así lo ha apuntado durante su comparecencia en la Comisión de Reconstrucción del Congreso de los Diputados. «En los próximos ejercicios se van a aumentar progresivamente los recursos hasta alcanzar el 7% del PIB. Este compromiso va más allá de lo cuantitativo porque queremos conseguir una planificación sostenida a lo largo del tiempo que permita ubicar los recursos allí donde es necesario», ha concretado.

El titular de Sanidad ha indicado también que todos los rebrotes que se han producido hasta ahroa se han detectado precozmente y se ha actuado rápido, pero «hay que concienciar a la ciudadanía de que esto está ahí».

Actualmente, y tras más de tres meses de confinamiento, el 78% de la población está en fase 3 de la desescalada. La últimas incorporaciones han sido Barcelona y Lleida, mientras que Madrid, Ávila, Salamanca, Segovia y Soria permanecen en la fase 2.

Una de las pruebas para la capacidad del sistema será la apertura de la movilidad entre territorios, que quedó vetada desde que se implantó el estado de alarma el pasado 14 de marzo. Para poder controlar los rebrotes, el sistema hará un control de los contactos de los contagios y estos serán sometidos a pruebas PCR —aunque no presenten síntomas—.

A pesar de que algunas comunidades ya están en la nueva normalidad, la movilidad entre autonomías no se efectuará hasta el próximo viernes. Las primeras comunidades en recibir personas del exterior serán el País Vasco y Cantabria.

Nuevas reservas estratégicas de material sanitario

Illa también se ha mostrado partidario de desarrollar reservas estratégicas de material sanitario esencial en todos los niveles administrativos para garantizar su disponibilidad a lo largo del tiempo.

Al mismo tiempo, el ministro ha reconocido que se necesita fortalecer y mejorar los sistemas de información epidemiológica, apuntalando la «integración automática y en tiempo real» de los datos de la historia clínica electrónica de los centros sanitarios. Una medida que, a su juicio, permitirá «aumentar» la velocidad y la cantidad de información.

Por otra parte —y tras avisar de que los pacientes deben estar en el centro del sistema— el ministro de Sanidad ha defendido los beneficios que tiene uso de la telemedicina, especialmente en los servicios de Atención Primaria, como así se ha demostrado durante la pandemia.

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