Sánchez pone hasta 3.750 millones en circulación para el automóvil

Después de casi dos años de tira y afloja con la patronal, el Gobierno ha presentado al fin este lunes su plan de apoyo a la automoción. Fue necesario el impacto del coronavirus para que Anfac y el Ejecutivo acordasen un paquete de ayudas de 3.750 millones de euros para la industria; una cantidad que se repartirá entre préstamos para impulsar el sector e incentivos a los compradores para renovar el parque español de vehículos.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, aseguró que las ayudas estarán disponibles «desde mañana mismo». De este modo, 1.535 millones se movilizarán ya este mismo año y los 2.215 millones restantes se liberarán a partir de 2021.

La mayor parte del plan irá destinado a actualizar las plantas y fábricas del país, con una partida de 2.690 millones de euros desde 2020. Además, 95 millones se destinarán a formación profesional y otros 415 millones de euros a investigación y desarrollo.

Con el plan, el Gobierno confía en atraer modelos eléctricos a España

«Con este proyecto creemos que es posible atraer inversiones para la fabricación de coches de bajo consumo», auguro Sánchez en su comparecencia. El líder socialista estuvo arropado por José Vicente de los Mozos, presidente de la patronal de fabricantes Anfac, y los sindicatos UGT y CCOO.

El paquete de inversiones para los fabricantes se torna especialmente de actualidad después de que las plantas del país tuvieran que paralizar su actividad por el impacto de la pandemia. Rizó el rizo el anuncio de Nissan de cerrar su centro en Barcelona, que ocupa a más de 2.500 trabajadores, aunque por causas previas al virus.

«El sector del motor saldrá fortalecido de la crisis», señaló Sánchez. «Este plan es un claro ejemplo del compromiso existente con el sector, pues sí queremos que siga siendo competitivo debemos hacer que se adapte a las nuevas demandas del mercado, tanto nacional como internacional», añadió.

El Gobierno también incentiva la compra de coches

El denominado Plan de impulso de la cadena de valor de la industria de la automoción también destina parte de sus fondos a subvencionar la compra de coches, totalmente paralizada durante los últimos meses por culpa del estado de alarma, que obligó a cerrar la totalidad de los concesionarios. 

La propuesta estrella para incentivar la adquisición de vehículos es un paquete de 250 millones de euros de ayudas directas para que particulares puedan renovar su automóvil. Además, se dotará con 100 millones nuevos el plan Moves y otros 100 millones para que la administración pueda adquirir turismos de cero emisiones. Los 100 millones restantes procederán del superávit de los Ayuntamientos, que podrán abordar una «renovación eficiente» de su flota.

Las ayudas serán efectivas desde este martes, de forma que todos los consumidores que compren desde entonces un vehículo podrán acceder si cumplen con los requisitos estipulados. La ayuda gubernamental saltará desde los 400 hasta los 4.000 euros según el vehículo adquirido.

Según el documento que resume el Plan de Impulso de la Cadena de Valor de la Industria de la Automoción, los automóviles con etiqueta CERO vendrán con una ayuda de 4.000 euros. Los que dispongan de la etiqueta ECO, el incentivo será de 1.000 y 600 euros –según su clasificación energética, A o B– y los que tengan la etiqueta C se primarán con entre 800 y 400 euros. Siempre en el caso de particulares.

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