Jordi Hereu, exalcalde de Barcelona, asume el reto de gestionar 2.250 millones de los Perte

El nuevo ministro de Industria se enfrenta al despliegue de las ayudas públicas y a la redacción de la nueva Ley de Industria para reflotar el sector

Jordi Hereu, ministro de Industria. EFE/Orlando Barría

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Jordi Hereu, exalcalde de Barcelona, vuelve del sector privado para ser el nuevo ministro de Industria. Un histórico del PSC, no es el primer edil de la ciudad condal que se traslada a Madrid para coger las riendas de este departamento, pero lo hace tras años fuera de la primera línea política y volcado en asesoría empresarial ante el difícil reto de reflotar la industria española y de gestionar los millonarios Proyectos Estratégicos para la Recuperación y Transformación Económica (Perte).

Hereu ha desarrollado gran parte de su trayectoria profesional en el Ayuntamiento de Barcelona, pero sus inicios se remontan al Port. En 1991, se incorporó como responsable de márquetin de Port 2000, para más tarde impulsar la constitución del Centre Intermodal de Logística (CILSA), dedicada a promover las actividades logísticas de la infraestructura portuaria.

Tras las municipales de 1999, entró en el consistorio para asumir la gerencia del distrito de Las Corts, para más tarde ejercer las responsabilidades en Seguridad y Movilidad, donde impulsó importantes políticas como la promoción del aparcamiento de pago en varios distritos de la ciudad. Se convirtió en alcalde en 2006, después de ser el primer candidato socialista en ser elegido en unas primarias. Durante su mandato se introdujo el primer servicio de alquiler de bicicletas público en Barcelona o la primera consulta para la construcción del tranvía de la Diagonal.

En 2011 se volvió a presentar a las elecciones para renovar su cargo, pero fue vencido por Xavier Trias, quien lideró el ayuntamiento de la ciudad hasta 2015. Fue entonces cuando Hereu se despidió de la primera línea política para dedicarse de pleno al sector privado.

El socialista creó la consultoría Inticity Consutling, dedicada a ayudar a las ciudades a impulsar políticas urbanas, y cofundó la plataforma empresarial Fladge Barcelona. Durante esta época también fue miembro del Consejo de Administración de Aena y del consejo asesor de Agbar.

Presidencia de Hispasat

En 2020 fue nombrado nuevo presidente de Hispasat, el operador español de comunicaciones por satélite controlado en un 90% por Red Eléctrica. Uno de sus mayores logros en su corta presidencia de la compañía fue conseguir ayudas públicas para proporcionar un servicio de conexión a internet de banda ancha en toda España, especialmente en zonas rurales donde el acceso a internet es limitado o inexistente.

De hecho, gestionar ayudas públicas va a ser uno de sus principales retos al frente de Industria. Hereu deberá repartir hasta 2.250 millones de euros procedentes de los Perte para el desarrollo del coche eléctrico y para la descarbonización industrial, tras las críticas por la gestión de las anteriores líneas de ayudas.

El plan para impulsar la movilidad eléctrica se inició con un paquete de 2.975 millones de euros procedentes de los fondos europeos, pero durante la primera convocatoria solamente se adjudicó el 30% del presupuesto, obligando al ministerio a aprobar una segunda edición. El bautizado Perte II está dotado de 1.400 millones de euros y se dividió en dos convocatorias, una de más de 500 millones de euros específica para impulsar la fabricación de baterías cuyos fondos ya están adjudicados, y una segunda para el resto de la cadena de valor, todavía en avaluación.

Hector Gómez, predecesor de Hereu en Industira, ya adelantó que se sumaría una tercera convocatoria dentro del Perte VEC, con 1.200 millones de euros más para gestionar a lo largo de 2024. En este caso, el nuevo titular del departamento será el encargado de moldear las ayudas, en un contexto en el que el sector reclama más apoyos para acelerar la transformación de la movilidad.

La Ley de Industria

Hereu también asumirá la gestión de los 1.000 millones de euros del Perte de la descarbonización industrial. Recientemente, Industria elevó a audiencia pública las bases regulatorias y publicó el primer borrador para que las empresas industriales puedan presentar observaciones.

En este sentido, otro de los retos pendientes que le deja Gómez es el desarrollo de la Ley de Industria, un proyecto que tiene como objetivo recuperar la fuerza industrial del sector en la economía española, con el objetivo que vuelva a representar el 20% del Producto Interior Bruto (PIB). El ministro canario se comprometió en mayo del año pasado a aprobarla en el Consejo de Ministros y elevarla al Congreso, pero la disolución de las Cortes la dejó en el aire.

El pasado viernes, la Alianza por la Competitividad de la Industria Española, que agrupa patronales del sector manufacturero, exigió al presidente Pedro Sánchez tras su investidura que la industria sea una prioridad en la nueva legislatura y propuso un nuevo modelo de gobernanza que garantice la autonomía estratégica, un crecimiento sólido y sostenible y la generación de empleo de calidad.

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