Una vacuna contra el coronavirus tiene éxito con ratones
Las pruebas realizadas en ratones han generado una oleada de anticuerpos que permitirían vencer al virus durante al menos un año desde el tratamiento
Esperanza en la ciencia para frenar el avance del coronavirus. Un parche colocado a ratones del tamaño de la punta de un dedo ha demostrado que se puede generar una respuesta inmunológica contra el nuevo coronavirus a niveles que podrían prevenir una infección.
Investiadores de todo el mundo trabajan sin descanso para encontrar una cura y vacuna contra la enfermedad respiratoria que ha matado a casi 47.000 personas e infectado a casi un millón en solo unos meses. Los investigadores aseguran que pudieron avanzar rápidamente en el desarrollo de una posible vacuna contra el Covid-19 después de trabajar en otras cepas como el SARS y el MERS.
“Estos dos virus, que están estrechamente relacionados con el SARS-CoV-2 (el nuevo coronavirus causante de la pandemia de Covid-19), nos enseñan que una proteína en particular, llamada proteína de pico (“spike protein” en inglés), es importante para inducir la inmunidad contra el virus”, explica Reuters la profesora asociada de la Facultad de Medicina de Pittsburgh, Andrea Gambotto.
“Una oleada de anticuerpos”
La doctora explica que sabían «exactamente dónde luchar contra este nuevo virus”. Cuando se probó en ratones, el prototipo de vacuna, bautizada como PittCoVacc, generó “una oleada de anticuerpos” contra el nuevo coronavirus en dos semanas.
Los investigadores advierten de que es demasiado pronto para decidr cuánto tiempo dura la respuesta inmune contra el Covid-19, puesto que estos animales todavía no han sido con suficiente tiempo. Las pruebas en ratones cuando trabajaron por una vacuna experimental contra el MERS produjo un nivel suficiente de anticuerpos para neutralizar el virus durante al menos un año.
También los niveles de anticuerpos de los animales vacunados contra el coronavirus parecen seguir la misma tendencia, según explica un estudio revisado por pares en la revista EBioMedicine. Este tratamiento es un parche del tamaño de la punta de un dedo con 400 agujas diminutas hechas de azúcar y la proteína de pico, explicó Gambotto.
