5 maravillas naturales de España que todo viajero debería conocer

España cuenta con grandes maravillas en plena naturaleza, ¿quieres descubrir algunas de las más impresionantes? ¡Anota!

Los Lagos de Covadonga en Asturias

Los Lagos de Covadonga en Asturias. Foto: Turismo Asturias

España es un país con una riqueza natural desbordante, donde cada rincón esconde paisajes que parecen sacados de otro mundo. Desde montañas que tocan el cielo hasta termas ocultas en la tierra, estas cinco maravillas son destinos que ningún amante de la naturaleza puede perderse.

1. Las Montañas del Fuego en Lanzarote: un paisaje de otro planeta

El Parque Nacional de Timanfaya, en Lanzarote, ofrece una experiencia única que parece transportarte fuera de la Tierra. Aquí, las Montañas del Fuego, formadas por las erupciones volcánicas entre 1730 y 1736, muestran un paisaje de cráteres rojizos y coladas de lava solidificada. Este lugar no solo es un espectáculo visual, sino también sensorial, ya que todavía se pueden sentir las altas temperaturas del magma subterráneo. Además, el restaurante El Diablo utiliza el calor natural del suelo para cocinar, ofreciendo una experiencia culinaria literalmente «de fuego». Las visitas guiadas y demostraciones geotérmicas convierten a este parque en un lugar imprescindible para explorar la fuerza de la naturaleza.

Las Montañas naturales del Fuego en Lanzarote
Las Montañas del Fuego en Lanzarote. Foto: Turismo Lanzarote

2. Lagos de Covadonga: la joya de los Picos de Europa

Ubicados en el corazón del Parque Nacional de los Picos de Europa, los Lagos de Covadonga son uno de los paisajes más icónicos del norte de España. Estos lagos de origen glaciar, Enol y Ercina, están rodeados de verdes prados y majestuosas montañas que ofrecen rutas de senderismo para todos los niveles. Durante el invierno, la nieve y la tranquilidad que caracteriza a esta temporada transforman el lugar en un escenario mágico. Además, la presencia de antiguas casas de piedra y rebaños de vacas pastando en los alrededores refuerzan el carácter auténtico de este destino. Es ideal para quienes buscan conectar con la naturaleza en su estado más puro.

Los Lagos de Covadonga en Asturias
Los Lagos de Covadonga en Asturias. Foto: Turismo Asturias

3. Las Médulas: el legado dorado de los romanos

En la provincia de León se encuentra un paisaje que combina la acción de la naturaleza y el ingenio humano: Las Médulas, la mayor mina de oro a cielo abierto del antiguo Imperio Romano. Este sitio, declarado Patrimonio de la Humanidad, impresiona por sus arenas rojizas moldeadas por siglos de extracción minera. En invierno, cuando la nieve cubre suavemente sus cimas, el contraste entre el blanco y el rojo crea una imagen única. Uno de los mejores lugares para disfrutar de este espectáculo es el Mirador de Orellán, que ofrece vistas panorámicas inolvidables. Además, la mezcla de castaños y robles aporta una diversidad paisajística que cautiva en cualquier estación del año.

Las Médulas de León
Las Médulas de León. Foto: Turismo Castilla y León

4. Valle de Ordesa: naturaleza en estado puro

En el Pirineo aragonés, dentro del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, se encuentra el Valle de Ordesa, un lugar que combina bosques densos, prados verdes y montañas imponentes. Este enclave, considerado el corazón del parque, ofrece rutas de senderismo tan populares como la que lleva a la Cola de Caballo, una espectacular cascada rodeada de belleza natural. Durante el recorrido, el visitante puede admirar los picos Monte Perdido, Añisclo y Cilindro, que se alzan como majestuosos guardianes del valle. La tranquilidad y la magia invernal de Ordesa lo convierten en un destino perfecto para los amantes de la montaña.

5. Termas de Ourense: relax natural junto al río Miño

Para quienes buscan un encuentro relajante con la naturaleza, las termas de Ourense son un paraíso. Esta provincia gallega, conocida como la capital termal de España, cuenta con más de 70 manantiales naturales. A lo largo del río Miño, termas como A Chavasqueira, Muíño da Veiga y Outariz ofrecen aguas cálidas ideales para descansar el cuerpo y revitalizar la mente. El Tren de las Termas, que conecta la ciudad de Ourense con estos manantiales, añade un toque pintoresco a la experiencia. Perfecto para cualquier época del año, pero especialmente reconfortante durante el invierno, este destino combina bienestar y naturaleza en un entorno único.

España tiene mucho más que ofrecer que sus ciudades históricas y playas soleadas. Desde paisajes volcánicos hasta lagos glaciares, pasando por cascadas, minas históricas y aguas termales, cada una de estas maravillas es un recordatorio de la increíble diversidad natural del país. Planifica tu próxima escapada y descubre por ti mismo por qué estos lugares son imprescindibles para cualquier viajero.

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