La manera más divertida de descubrir Berlín
Gracias a estar en tierras llanas Berlín es ideal para conocerla en bicicleta. Esta es la propuesta para pedalear durante tres días en la capital alemana

La puerta de Brandenburgo es el KM 0 de los paseos en bicicleta. Foto Dagmar Schwelle – Visit Berlín
Sí, Berlín es grande, muy grande. Pero los alemanes saben cómo hacer fácil lo difícil y han apostado fuerte por la cultura de la bicicleta como medio de movilidad sostenible, económico y rápido.
Alrededor de un 30% de sus habitantes usan este medio de transporte frecuentemente, y su importancia es tal que el gobierno municipal anunció la construcción de una autopista para bicicletas de 38 kilómetros de largo, que atravesará la ciudad de este a oeste.
El kilómetro cero, como cabe esperar, será la puerta de Brandenburgo, y de allí un ramal irá al este hasta la estación de Hönow en el distrito de Märkisch-Oderland, mientras que para el oeste llegará hasta Dallgow-Döberitz, ya fuera de la capital.
Otras zonas de la ciudad que serán cubiertas por esta vía rápida para bicis serán los distritos de Lichtenberg, Friedrichshain-Kreuzberg, Mitte, Charlottenburg-Wilmersdorf y Spandau.
Para el 2024 Berlín espera contar con una autopista para bicicletas que atraviese la ciudad de este a oeste por 38 km
Si bien este proyecto no verá la luz hasta 2024, igualmente se puede explorar la ciudad con comodidad en estos tres trazados, que se pueden hacer día por día para no quedar agotado por el placer de pedalear.
Lo que no se puede dejar de ver de Berlín en bicicleta
La propuesta de Turismo de Berlín es, una vez más, iniciar esta ruta por los principales puntos turísticos de Berlín desde la Puerta de Brandenburgo. En realidad casi no hace falta pedalear para llegar al cercano Parlamento (Reichstag) y subir por la cúpula de vidrio diseñada por Norman Foster.
El recorrido sigue por el Regierungsviertel, el barrio gubernamental, donde se pasa por la Cancillería Federal y de ahí a la emblemática Columna de la Victoria, la Siegessäule, rodeada del gigantesco pulmón verde del Parque Tiergarten.
Antes de entrar en su laberinto de senderos se sugiere desviarse al barrio de Hansaviertel, un barrio reconstruido tras la Segunda Guerra que es un catálogo de arquitectura racionalista y moderna de siglo XX.
El Tiergarten presenta innumerables caminos y senderos en un gigantesco pulmón verde en medio de Berlín
Bordeando el río Spree se regresa al Tiergarten, pero lo mejor es seguir hasta el canal Landwehrkanal y de ahí sí, por fin, pasear con tranquilidad por su laberinto de caminos, árboles y kioscos.
Una de las salidas es por la calle Ebrerstrasse, para llegar a Postdamer Platz, seguramente uno de los lugares donde Berlín mejor presume de modernidad, y finalizar el viaje
El recuerdo del Muro en bici
La segunda ruta recorre la antigua frontera entre la RFA y la RDA a través del trazado del Muro de Berlín.
De aquella vergonzosa pared derribada en 1989 solo quedan unos pocos tramos. El punto de partida es la East Side Gallery, franja de 1,3 km que se convirtió en un interesante escaparate de arte urbano.
Tras pasar por el Monumento a Peter Fetcher se llega al famoso Checkpoint Charlie que reproduce uno de los puestos de control, y donde hay un museo privado con la historia del Muro.
En el sitio conocido como Topografía del Terror hay otro tramo de 200 metros, y a lo largo de la Stresemannstrasse hay puestos de información y antiguas torres de vigilancia levantadas por la RDA.
En tanto en la Bernauer Strasse hay otro centro de documentación que reproduce la estructura del muro con sus alambres de espinos, casamatas y bloqueadores de hierro en la tierra de nadie.
Este trayecto de 12,7 km se recorre en una hora y media, pero los ciclistas de largo aliento pueden hacer una ruta de 160 km por la totalidad del antiguo muro, donde una serie de columnas marcan por donde transcurría esta cicatriz de hormigón y alambradas.
Paseo por un aeropuerto vacío
El antiguo aeropuerto de Tempelhofer se reconvirtió en un gigantesco parque y centro cultural, en el límite entre los barrios de Tempelhof, Neukölln y Kreuzberg.
Tempelhofer es el único aeródromo del mundo en el que se puede circular en bicicleta
“Es el único aeródromo del mundo en el que se puede circular en bicicleta” dicen en Turismo de Berlín, donde las pistas de aterrizaje principales y las secundarias, así como los caminos auxiliares, son un entramado de senderos de asfalto que se pueden recorrer en cualquier sentido, compartiendo los carriles con patinetes, corredores o gente que simplemente sale a caminar.
Para conocer la historia de este aeropuerto, ya sea desde su origen como sede de los Caballeros Teutónicos a su pasado como campo de concentración y su punto de abastecimiento de la población en el puente aéreo de 1948/49 se puede conocer en la ruta didáctica del Tempelhofer Feld.