Parador de Ávila, historia y confort en el corazón de la ciudad amurallada

Es uno de esos paradores en los que merece la pena perderse durante una escapada, ¡descubre el Parador de Ávila!

El exterior del Parador de Ávila

El exterior del Parador de Ávila. Foto: Paradores

Ubicado en pleno corazón de la ciudad de Ávila, el Parador de Ávila es mucho más que un simple lugar de hospedaje; es una experiencia única que combina historia, cultura y gastronomía en un marco incomparable. Este impresionante edificio, el antiguo Palacio de Piedras Albas, data del siglo XVI y está rodeado por las monumentales murallas de la ciudad, lo que lo convierte en un refugio ideal para quienes buscan sumergirse en el ambiente medieval de esta ciudad Patrimonio de la Humanidad.

Un palacio con historia

El Parador está construido sobre un antiguo palacio renacentista, un edificio cargado de historia y encanto. Sus gruesos muros de piedra, la elegancia de su arquitectura y su ambiente tranquilo invitan a los visitantes a viajar en el tiempo mientras disfrutan de todas las comodidades modernas. El interior es acogedor e intimista, con amplias habitaciones que ofrecen un descanso reparador después de un día de exploración por la ciudad. Los detalles arquitectónicos del edificio se han mantenido intactos, integrándose a la perfección con las comodidades actuales, lo que crea una atmósfera que conjuga tradición y modernidad.

Uno de los principales atractivos del Parador es su ubicación, ya que se encuentra adosado a la muralla medieval de Ávila. Desde el comedor, a través de un patio acristalado, se puede disfrutar de impresionantes vistas tanto de los jardines que rodean el Parador como de las murallas que lo circundan. Este rincón privilegiado ofrece a los huéspedes una experiencia visual que complementa a la perfección su estancia.

El exterior del Parador de Ávila
El exterior del Parador de Ávila. Foto: Paradores

Una inmersión en la gastronomía abulense

El Parador de Ávila no solo destaca por su valor histórico y arquitectónico, sino también por su propuesta gastronómica. Su restaurante, Piedras Albas, está dedicado a la cocina tradicional de la región y se ha convertido en un auténtico embajador de los sabores de la tierra abulense. Entre los platos que se pueden disfrutar, destacan las judías de El Barco, las patatas revolconas y el famoso chuletón de ternera de raza Avileña Negra Ibérica, un manjar que ha ganado fama por su exquisito sabor y su calidad inigualable.

Además de estos clásicos, el restaurante también ofrece cochinillo asado, pucheretes teresianos y deliciosos postres tradicionales, como las yemas de Santa Teresa, un dulce que lleva el nombre de la santa abulense y que es una parada obligatoria para los visitantes con paladar goloso. Cabe destacar que el Parador organiza anualmente unas Jornadas Gastronómicas de las Judías del Barco, un evento en el que se rinde homenaje a uno de los productos más emblemáticos de la región.

Un chuletón en el Parador de Ávila
Un chuletón en el Parador de Ávila. Foto: Paradores

Un entorno histórico y natural incomparable

El Parador no solo es el punto de partida perfecto para conocer la ciudad de Ávila, sino también para disfrutar de su entorno natural y cultural. La ciudad, con sus impresionantes murallas y sus calles empedradas, es un viaje al pasado. Pasear por el adarve de la muralla y contemplar desde las alturas la ciudad medieval es una de las actividades imprescindibles. Dentro de la ciudad, destaca la Catedral de Ávila, la primera catedral gótica de España, que alberga un imponente retablo de Pedro Berruguete, una obra de arte que no deja indiferente a ningún visitante.

Pero más allá de las murallas, Ávila ofrece una riqueza cultural y natural inigualable. A solo una hora en coche se encuentra el Parque Nacional de la Sierra de Gredos, un paraíso natural donde los amantes del senderismo, ciclismo o equitación pueden conectar con la naturaleza en su estado más puro. Este entorno es ideal para quienes buscan una escapada activa, o simplemente desean relajarse y disfrutar del paisaje montañoso.

El entorno en el Parador de Ávila
El entorno en el Parador de Ávila. Foto: Paradores

Eventos y celebraciones en un marco único

El Parador de Ávila también se ha consolidado como un lugar ideal para la celebración de eventos y reuniones. Gracias a la profesionalidad de su equipo y a la belleza de sus instalaciones, es el sitio perfecto para bodas, banquetes o eventos corporativos que busquen un ambiente exclusivo y con un toque histórico. Sus salas polivalentes y la oferta gastronómica de alta calidad aseguran que cualquier evento que se celebre en este lugar será recordado como una experiencia memorable.

Uno de los salones del Parador de Ávila
Uno de los salones del Parador de Ávila. Foto: Paradores

Una estancia inolvidable

En el Parador de Ávila, cada detalle está pensado para ofrecer una estancia inolvidable. Desde las cómodas habitaciones que combinan diseño y funcionalidad, hasta los jardines donde se pueden admirar sarcófagos, pilas bautismales y un verraco del siglo V a.C., la historia y la cultura están presentes en cada rincón del Parador. Las instalaciones también incluyen parking exterior gratuito y garaje de pago, asegurando comodidad para los visitantes.

Una de las habitaciones del Parador de Ávila
Una de las habitaciones del Parador de Ávila. Foto: Paradores

Este emblemático Parador es, sin duda, un lugar donde la historia se entrelaza con la modernidad, permitiendo a los visitantes disfrutar no solo de un alojamiento único, sino de una experiencia que abarca desde la rica gastronomía hasta el contacto con el entorno monumental de una de las ciudades más bellas de España. Una estancia en el Parador de Ávila es una invitación a descubrir los secretos de esta joya medieval y a disfrutar de lo mejor que la tradición abulense tiene para ofrecer.

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