Pasarelas del Barranco do Demo: un nuevo destino de senderismo en el Algarve
¿Quieres descubrir las mejores zonas del Algarve portugués? No puedes perderte estas pasarelas, ¡merecen mucho la pena!

Las pasarelas del Barranco do Demo en el Algarve portugués. Foto: YouTube
En el corazón de la serena Sierra de Monchique, en la pintoresca aldea de Alferce, se han inaugurado las pasarelas del Barranco do Demo, un atractivo que promete posicionarse como uno de los destinos favoritos para los amantes del senderismo en el Algarve. Este recorrido de madera, de aproximadamente 2 kilómetros de ida y vuelta, combina la espectacularidad de un paisaje natural con la comodidad de un sendero bien diseñado.
Un paseo entre montañas y desfiladeros
El trayecto comienza en Alferce, una aldea que parece detenida en el tiempo. Las pasarelas ofrecen una experiencia única al atravesar un desfiladero a unos 50 metros de altura, brindando vistas inigualables de la Sierra de Monchique. El recorrido, si bien es accesible para la mayoría, incluye tramos con escaleras y un emocionante puente colgante que desafía a quienes buscan un toque de aventura.
La primavera y el otoño son las estaciones ideales para visitar este lugar, cuando la vegetación de la sierra luce en todo su esplendor. Sin embargo, las pasarelas están abiertas durante todo el año, permitiendo disfrutar de sus encantos en cualquier temporada.
Más allá de las pasarelas: un viaje en el tiempo
Para los excursionistas que deseen explorar más allá, las pasarelas se conectan con un sendero de 6,5 kilómetros que lleva hasta el castillo de Alferce, una fortificación islámica de los siglos IX y X. Aunque hoy en día solo quedan ruinas, el lugar es un mirador privilegiado desde donde se pueden apreciar las montañas circundantes y la albufera de la ribeira de Odelouca. Este punto combina historia, arqueología y naturaleza en un mismo espacio, haciendo que la caminata valga aún más la pena.
El acceso a las pasarelas es completamente gratuito, un detalle que refuerza el compromiso de la región por fomentar el turismo sostenible y accesible. Los visitantes pueden dejar sus vehículos cerca del cementerio o de la iglesia de Alferce y seguir las señales hacia el inicio del recorrido. Es recomendable llevar calzado cómodo, agua y protección solar, especialmente en los meses más cálidos.
Descubriendo Monchique: más que senderismo
La Sierra de Monchique es un tesoro natural y cultural que complementa perfectamente la experiencia de las pasarelas. A solo una hora del aeropuerto de Faro, este rincón del Algarve es conocido por su balneario de aguas termales, un legado que se remonta a la época romana. El Monchique Thermal Resort es un lugar ideal para relajarse después de una caminata.
Además, no se puede dejar de visitar el Pico da Fóia, el punto más alto del Algarve con 902 metros de altitud, desde donde se pueden contemplar vistas panorámicas que alcanzan hasta la costa. La cascada de Barbelote y las ruinas del convento de Nossa Senhora do Desterro también son paradas obligadas para quienes buscan sumergirse en la riqueza histórica y natural de la región.
Sabores y tradiciones del Algarve interior
Monchique también invita a descubrir su gastronomía local. Entre los productos típicos destacan el licor de medronho, los embutidos tradicionales y el dulce conocido como bolo de tacho. Estos se pueden encontrar en el mercado de la aldea, un lugar ideal para llevarse un recuerdo único de la región.
Un destino para todos los públicos
Las pasarelas del Barranco do Demo son una opción perfecta para familias, excursionistas y amantes de la naturaleza que buscan una experiencia diferente en el Algarve. Combinan aventura, accesibilidad y una conexión íntima con el entorno natural, todo sin alejarse demasiado de otros puntos de interés.
Con la apertura de estas pasarelas, el Algarve amplía su oferta turística más allá de sus icónicas playas. El Barranco do Demo se presenta como un destino imprescindible para quienes buscan combinar naturaleza, aventura y cultura en un solo lugar. Ya sea disfrutando del puente colgante, explorando el castillo de Alferce o simplemente admirando la serenidad de la Sierra de Monchique, esta experiencia promete dejar huella en cada visitante.