Los Miarnau se deshacen de otra empresa para hacer frente a su deuda

La deuda tiene ahogadas a las grandes constructoras españolas, y la catalana Comsa no es una excepción. Para hacer frente a ella, los Miarnau han tomado en los últimos años el camino de las desinversiones, la última de ellas anunciada este mismo viernes: la venta de su filial Aritex al grupo chino Avic International, como adelantó hace más de tres meses Economía Digital.

La compañía presidida por Jorge Miarnau no ha hecho públicos más detalles de la operación, que se podría haber cerrado en unos 50 millones de euros. Esta cifra no llega a la facturación anual de la compañía, que en 2014 ingresó 65,9 millones de euros, con unas pérdidas de 4,6 millones. Aritex tenía entonces unos 115 trabajadores.  

Aritex es la compañía del grupo dedicada a la tecnología aeroespacial y su venta se enmarca en la estrategia de Comsa de desinversión en los sectores no estratégicos para la compañía.  

Desinversiones  

El grupo de los Miarnau tiene problemas con una deuda que supera los 1.000 millones de euros y que está intentando refinanciar con la banca. Para reducir este pasivo y centrarse en su core business para ganar credibilidad ante las entidades financieras, Comsa ha vendido varias de sus filiales.  

A finales del año pasado, traspasó el 74% que tenía de CLD, empresa de recogida y tratamiento de residuos catalana. CLD cerró 2014 con una facturación de unos 59 millones de euros, una plantilla de un millar de trabajadores y una flota de 400 vehículos.    

También en 2015 vendió a Allianz Capital Partners y al fondo de infraestructuras canadiense Bastion Infraestructure sus participaciones minoritarias en cuatro activos ferroviarios de España, entre los que se encontraban los tramos 2 y 4 de la línea 9 del Metro de Barcelona y su participación en el Metro Ligero Oeste en Madrid.