Antoni Abad contra Borrell y Gay de Montellà: una Cataluña independiente seguirá en la UE

El presidente de Cecot considera que si saliera temporalmente, volvería a entrar

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Los temores de quedar fuera de la Unión Europea no afectan a algunos empresarios catalanes. Antoni Abad, presidente de Cecot, rechaza los reiterados pronunciamientos de políticos europeos, o las advertencias de ex ministros, como Josep Borrell, y entiende una Cataluña independiente no podría quedar fuera de la Unión Europea.

Abad sostiene que la Unión Europea «es la primera interesada que el conjunto de Europa funcione», y, por tanto, Cataluña tendría garantizado –en primer lugar– el euro como moneda y los movimientos de productos y capitales.

Sin fatalismos

Se niega la mayor, por tanto. Abad, que participa en un acto este jueves junto con otras patronales, incide en que algunos economistas como Joan B.Casas, Jordi Galí, Miquel Puig y Xavier Sala Martí, que participan en ese cónclave, «volverán a explicar que se puede realizar un camino que no conducirá a ningún fatalismo».

El jefe de la patronal Cecot, que estuvo a punto de ser consejero en el Govern de Artur Mas en 2012, ha afirmado en una entrevista en TV3 que existe una pluralidad de criterios en el seno de su patronal, pero que «el 98% dice que no se puede continuar como hasta ahora».

Acusación a Foment

Y ha aprovechado para cargar también contra Foment, al entender que no ha debatido en profundidad el proceso soberanista. Asegura Abad que en el seno de Cecot sí se ha producido, y que lo ha echado de menos en Foment, a pesar de que él forma parte de su junta directiva.

Según Abad, el documento de Foment, en el que denunciaba «tensión y máxima preocupación» por el proceso soberanista, no pasó por la Junta. Para Abad estaría bien que en Foment, que preside Joaquim Gay de Montellà, se pudiera debatir de verdad, para que el presidente de la patronal de patronales tuviera una visión más completa de la opinión de sus integrantes.

Se trata de un dardo, en toda regla, de Abad a Gay de Montellà, en un momento de gran tensión antes de las elecciones del 27 de septiembre.  

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