Hacer la compra en España es una ruina: gastamos más en comida pese a que adquirimos menos productos

El consumo se reduce un 7,1% respecto 2021 por el incremento de precios en un 8,7%

Varias personas hacen la compra en un supermercado de Madrid. EFE/Eduardo Oyana

Varias personas hacen la compra en un supermercado de Madrid. EFE/Eduardo Oyana

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Los españoles gastaron un 2,7% más en alimentación en 2022, un año marcado por la inflación y las consecuencias de la guerra en Ucrania, si bien, no se tradujo a un mayor consumo, que descendió un 7,1% en volumen respecto el año anterior.

Así lo revela el informe del del consumo alimentario en España de 2022 del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) que ha presentado este jueves el titular del departamento, Luis Planas.

107.780 millones en alimentación

En total, el gasto en alimentación ascendió a 107.780,5 millones de euros (+2,7 %), el 68,6% dentro del hogar, con un gasto per cápita de 2.582 euros, lo que se traduce en un aumento de 87,3 euros.

La alimentación fresca -especialmente los lácteos, las frutas y las hortalizas- lidera la cesta de la compra de los consumidores, que representó el 37,3% en volumen y el 40,7% en valor. El pescado y la carne representaron apenas el 10% del volumen, frente al 31% del valor.

Expositor de frutas y verduras en un mercado. Foto: Pixabay

El principal punto de venta de los españoles fueron los supermercados que concentraron el 49,5% de la alimentación dentro del hogar, seguidos de lejos por las tiendas de descuento (13,7 %), los hipermercados (12,8 %), las tiendas tradicionales (12,7 %), otros canales (11,2 %) y el comercio electrónico (2,3 %).

El consumo se reduce un 7,1% por el incremento de precios

Los españoles consumieron 30.946,8 millones de kilos o litros el año pasado, lo que supone un 7,1% que en 2021, año posterior a la pandemia del Covid-19. Del total, el 87,2% del consumo se produjo en el hogar y el resto fuera de éste, de modo que el consumo per cápita fue de 698,5 kilos.

El consumo en el hogar se redujo el 8,8% anual, situándose en 26.987,66 millones de kilos o litros, si bien el gasto disminuyó el 0,9%, hasta los 73.893,4 millones de euros, influido por el incremento de los precios en un 8,7%.

Una trabajadora de un establecimiento de hostelería. Foto EFE - David Arquimbau Sintes
Una trabajadora de un establecimiento de hostelería. Foto EFE – David Arquimbau Sintes

No obstante, pese a la subida de precios, el consumo fuera del hogar siguió en la seda de la recuperación, con un crecimiento del 6,1% en volumen (3.959,2 millones de kilos) y del 11,5% en valor (33.887,1 millones de euros), tras encarecerse el 5,1%.

Además, se mantuvieron los pedidos para llevar o a domicilio. El 69,1% del consumo extradoméstico se hizo en el establecimiento; el 11,6% en la propia casa; el 6,2% en el trabajo; el 5,2% en casa de otros y el 4,9% en la calle.

Raquel Navarro Pérez

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