Ikea y H&M se ven envueltas en un escándalo por trabajos forzados

Una investigación prueba que China tiene campos de trabajos forzados: numerosas multinacionales están implicadas

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La persecución a la población Uighur en China ha sido ampliamente documentada a lo largo de los últimos años, después de que casi un millón de miembros del grupo minoritario musulmán fueran detenidos. 

Las impactantes imágenes filtradas el noviembre de 2018 mostraban que muchos Uighurs, que habían sido detenidos en la provincia de Xinjiang, vivían en condiciones similares a las de una prisión mientras también crecía la vigilancia al grupo minoritario por parte de las autoridades de Pekín. En febrero, Business Insider informó de que el movimiento chino Belt and Road Initiative podría ser una de las causas de la creciente opresión.

Ahora, el programa de ABCFour Corners, ha dado con nuevas evidencias de miembros del grupo Uighurs que han sido detenidos y sometidos a trabajos forzados en una fábrica, elaborando productos textiles para marcas reconocidas mundialmente.

Un portavoz del grupo Cotton On confirmó que una de las fábricas, Litai Textiles, es una compañía subcontratada por uno de sus proveedores directos

La investigación realizada por la cadena de televisión ha sacado a la luz a Uighurs que fueron detenidos y trasladados a campos de reeducación para obligarlos a realizar trabajos no voluntarios en fábricas en Xinjiang. 

El reportaje se refiere a seis marcas que se surten del algodón que se produce en esta controvertida región: Target, Cotton On, Jeanswest, Dangerfield, Ikea y H&M

Un portavoz del grupo Cotton On confirmó a Business Insider que una de las fábricas con sede en Xinjiang a las que se refiere la investigación, Litai Textiles, es una compañía subcontratada por uno de sus proveedores directos en la región y está, ahora, llevando a cabo una investigación por su cuenta. 

Un portavoz de Jeanswest aseguró a Business Insider que no se sirve de “ninguna fábrica de corte o de tapizado” que opera en la provincia

“Tras haber rastreado y auditado el 100% de nuestros proveedores directos, nuestro plan es continuar ampliando esta investigación a niveles posteriores de nuestra cadena de suministro, incluidos las subcontratas de materias primas, telas y otros materiales, como Litai Textiles”, dijo el portavoz.

“El grupo Cotton On tiene una política de tolerancia cero hacia cualquier forma de esclavitud moderna, incluyendo los trabajos forzados”.

Target también respondió a la solicitud de comentarios, y un portavoz de la compañía confirmó a Business Insider que uno de sus proveedores directos utiliza una “pequeña cantidad de hilo de algodón” de una de las fábricas propiedad de Huafu, un fabricante textil de Xinjiang que figura en el reportaje.

Una tienda de Ikea en A Coruña. Foto: Archivo/EFE
Ikea y Dangerfield han confirmado que se han aprovisionado de algodón de la provincia de Xinjiang. Fuente: Ikea

“Target está llevando a cabo un análisis de la situación”, afirmó el portavoz. “Como parte de nuestro Código Ético de Proveedores, Target se toma muy en serio cualquier infracción de este código, esto incluye cualquier denuncia de trabajos forzados”. 

Un portavoz de Jeanswest aseguró a Business Insider que no se sirve de “ninguna fábrica de corte o de tapizado” que opera en la provincia pero que “no puede descartar” que no se haya aprovisionado de hilo de algodón producido en la zona de Xinjiang.

La confirmación de Ikea y Dangerfield

Ikea y Dangerfield han confirmado a la cadena de televisión ABC que se han aprovisionado de algodón de la provincia de Xinjiang, pero ambos dijeron que no estaban al corriente de ningún trabajo forzado entre sus empresas subcontratadas. Business Insider se puso en contacto con Ikea, Dangerfield y H&M para obtener comentarios.

La investigación desentierra historias personales de Uighurs, que han sido sometidos a condiciones impactantes en Xinjiang. 

Una mujer Uighur ha contado que ha sido forzada a limpiar la fábrica cuando su mala visión le impedía realizar bordados complicados, mientras que otras han sido objeto de registros telefónicos y corporales cuando llegaban y salían de los trabajos forzados a coser guantes, informó ABC

Los desempleados y los granjeros también han sido forzados a trabajar contra su voluntad, según cuenta la investigación. El académico alemán, Adrian Zenz, un investigador de la Escuela Europea de Cultura y Teología, dijo a ABC que las historias que quedaban por cubrir por su investigación son parte de un “gran plan…de trabajo involuntario” desarrollado por parte de las autoridades chinas. 

Noticia original de Business Insider. Autor: Aleks Vickovich

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