EiDF bate los 500 millones de capitalización casi un año después de su crisis con la CNMV
La compañía de origen gallego se sitúa como la segunda con mayor valor en bolsa de todo el BME Growth tras el último rebote de sus acciones al calor de su acuerdo con Atitlan y la amortización de pagarés
EiDF resurge en bolsa. La compañía de origen gallego especializada en proyectos de energía solar fotovoltaica ha vuelto a pulverizar los 500 millones de euros de capitalización bursátil por primera vez desde su choque con la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) hace casi un año.
Tras su rebote del 3,9% en la sesión del jueves, la firma que preside Fernando Romero ha elevado hasta el 41,4% su revalorización en lo que va de 2024. En concreto, sus acciones permanecen instaladas en estos momentos en los 8,84 euros, lo que ha permitido que el valor en bolsa de la compañía se haya encaramado hasta los 523,9 millones de euros.
Tras estos recientes repuntes en el parqué, EiDF se ha situado como la segunda mayor empresa de todo el BME Growth por capitalización excluyendo a las socimis. Sus 523,9 millones de euros tan solo son superados por los 840,3 millones de Proeduca Altus, la matriz de la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR).
Cox Energy y Altia, ambas igualadas con 323,3 millones de euros, y Natac Natural Ingredientes (la antigua IFFE Futura), con 276,5 millones de euros completan el top 5 de empresas con mayor valor en este índice anteriormente conocido como Mercado Alternativo Bursátil (MAB).
EiDF casi triplica su valor desde mínimos
De esta forma, EiDF, que el pasado verano formalizó el traslado de su sede a Madrid, roza los niveles del pasado 28 de agosto. Fue entonces cuando, en su regreso al parqué, la compañía despidió la sesión con sus acciones instaladas en los 8,93 euros. Sus títulos se situaron a estos niveles en una jornada en la que vieron cómo se evaporaba el 70% de su valor.
Y es que ese lunes se levantó la suspensión temporal que pesaba sobre sus acciones desde cuatro meses antes. Fue el 14 de abril del año pasado cuando la CNMV tomaba la decisión de suspender a EiDF de cotización en bolsa ante la negativa de su nuevo auditor PwC a firmar sus cuentas anuales hasta que no dispusiese de información adicional.
Este traspiés impedía, según la CNMV, a EiDF de cumplir con los plazos para la presentación de sus cuentas anuales. Tras presentar sus cuentas reformuladas con el visto bueno del auditor, que ponía de relieve unas «incidencias relevantes que suponen la existencia de debilidades significativas en el modelo de gobierno corporativo y el sistema de control interno», la CNMV le dio visto bueno a su regreso al parqué.
La empresa pasó de capitalizar los alrededor de 1.800 millones de euros que marcaba antes de la suspensión bursátil a hundirse hasta los 3,4 euros por acción en noviembre y ver reducido su valor en bolsa hasta los 201,5 millones de euros. Sin embargo, desde entonces la firma ha logrado revertir la situación tras amortizar sus últimos pagarés, cerrar un acuerdo clave con el fondo Atitlan y actuar sobre sus deficiencias en el modelo de gobierno corporativa al dotarse de una comisión de responsabilidad corporativa y sostenibilidad, fichar a nuevos consejeros independientes, así como separar las funciones del consejero delegado y el presidente.