El Grupo Cortizo roza los 900 millones en ventas y bate récords de exportaciones y beneficios

José Manuel Cortizo Soñora y su hija, Raquel Cortizo Almeida, pilotan un grupo consolidado que no solo se sitúa ya entre los grandes de su sector, sino también entre los principales conglomerados industriales gallegos por ingresos. Las cuentas de Cortizo Cartera correspondientes a 2022, un año especialmente complicado por la guerra de Ucrania y el proceso inflacionario, así lo demuestran: roza los 900 millones en ventas y bate récords de exportaciones y beneficios.

En concreto, las cuentas consolidadas de Cortizo Cartera, que integra una docena larga de empresas con base en Padrón, muestran que cerró 2022 con una cifra de negocio de 881 millones de euros, lo que supone un avance del 26,5% sobre el ejercicio precedente. En 2021 la variación en la cifra de negocio, situada entonces en 696,4 millones, había sido del 48,5% con respecto al año anterior. Por tanto, una cierta ralentización derivada del contexto internacional, donde tiene el grueso de sus ventas.

Resistir creciendo

“En 2022, el efecto de la guerra de Ucrania, el incremento del precio de las materias primas y la energía, la inflación y las subidas de tipos ocasionaron un resentimiento de las ventas en toneladas con respecto al año 2021, un ejercicio en el que el Grupo Cortizo había logrado su récord histórico”, explica la compañía. “A pesar de ese contexto menos favorable, las cifras de producción del último año superaron ampliamente las logradas en 2020 y 2019”, afirma en su memoria.

Es la generación de caja y la propia gestión de la compañía lo que hace que el grupo de José Manuel Cortizo sitúe sus beneficios por encima de los 90 millones de euros. Concretamente, al cierre de 2022, el beneficio neto consolidado de Cortizo Cartera alcanzó los 92,4 millones, por encima de los 89,4 millones firmados en 2021. El resultado de explotación del grupo fue de 109,5 millones de euros, frente a los 104,3 millones del año anterior.

Récord de exportaciones

Durante el pasado ejercicio el grupo logró una producción anual de 106.377 toneladas de aluminio y 17.109 toneladas de PVC, las cuales han sido comercializadas en 79 países diferentes de Europa, América, África y Asia; “situándose el porcentaje de ventas exteriores en el 76%, cifra récord en la historia de nuestra compañía”, detallan.

Fundada en Padrón en 1972, Cortizo es la compañía líder en España y referente internacional en el diseño y fabricación de soluciones de aluminio y PVC para la arquitectura y los sectores industriales. En 2012 tomó forma Cortizo Cartera, como holding que también integra otros negocios, como la firma padronesa de pieles Picusa, histórica en su sector, y otros negocios.

Inversión de 430 millones en diez años

Frente a las tendencias del mercado, en las que las empresas dirigen su modelo de negocio hacia la externalización, “en Cortizo siempre hemos apostado por realizar internamente todas las fases del proceso productivo: fundición, extrusión, lacado, anodizado, mecanizado, embalaje, almacenamiento y distribución”. Esa ha sido una de las claves del éxito, a la que se une una política de reinversión de beneficios que se ha reforzado en la última década, “en la que hemos destinado más de 430 millones de euros a la puesta en marcha, extensión y mejora de nuestras fábricas y delegaciones”.

El departamento de ingeniería de grandes desarrollos, especializado en envolventes a medida para proyectos de especial complejidad técnica en todo el mundo, diseñó el año pasado nuevas soluciones de fachada para obras singulares como la ampliación del Hospital de Boston, la rehabilitación del Palacio de Justicia de Zagreb, la nueva terminal del Aeropuerto de Lima, Up-site Tower en Bucarest, o la torre Great Charles Street de Birmingham.

Incertidumbres

El grupo resalta en su memoria que “la crisis de precios e incluso de cierta escasez de algunas materias primas motivada por la invasión rusa de Ucrania está derivando en efectos inflacionistas al entorno económico general, y por tanto a las entidades del grupo, cada una en sus propias particularidades”. “Considerando la complejidad y gran interdependencia de los mercados en los que el Grupo fabrica y los mercados a los que atiende, las consecuencias para sus operaciones son en cierto grado inciertas”, explican.