El interés del Govern de la Generalitat por atraer la inversión del complejo de juego y ocio bautizado como Eurovegas le ha llevado a movilizar al lobby empresarial judío barcelonés para que contribuya a convencer al magnate estadounidense Sheldon Adelson, también judío, de la idoneidad de emplazar su inversión en territorio catalán.
La importancia de ese factor no es menor, según fuentes conocedoras de los contactos, puesto que el propio Adelson llegó a Barcelona el lunes acompañado por el representante de la Casa Judía en Madrid, Sam Toledano.
En ese primer encuentro ya participó Isak Andic, propietario de Mango y de origen judío, junto a Marc Puig (Grupo Puig) y el intermediario Carles Vilarrubí (actual representante de Rothschild en España). Los Rothschild son un grupo de financieros judíos que participaron activamente en la creación del estado de Israel.
El Govern se ha planteado incluso la posibilidad de realizar una visita de una delegación catalana a Las Vegas para tratar con el magnate las posibilidades de localizar la inversión en el área metropolitana de Barcelona. Al encuentro también se invitaría al publicista Lluís Bassat, otro destacado miembro de la comunidad judía empresarial.
