Rafael Medina Abascal inaugura la primera tienda Scalpers en Barcelona
El establecimiento barcelonés, de 250 metros cuadrados, ha supuesto una inversión de 350.000 euros.
Dicen que es uno de los hombres más elegantes del mundo. Alto, guapo y con un pedigrí imponente, Rafael Medina Abascal, Duque de Feria y Marqués de Villalba, dejó hace seis años su trabajo en un banco para ejercer de empresario en el mundo de la moda masculina. Su firma, Scalpers, acaba de aterrizar en Barcelona.
El nuevo local, ubicado en la zona más comercial de la ciudad –la calle Provenza junto al Paseo de Gracia–, se vistió de fiesta para la inauguración oficial. Ejercieron de anfitriones Alfonso Vivancos y Borja Vázquez, los dos socios sevillanos, porque Rafael Medina, el socio más mediático, se hizo esperar.
El hijo de Nati Abascal, llegó tarde y solo. Y lo cierto es que sin la presencia de su famosa madre ni la de su mujer, Laura Vecino, Rafael Medina no provoca tumultos. Tampoco lo pretende. Es tímido y parece querer pasar inadvertido. Había elegido un traje clásico de raya diplomática combinado con pañuelo en el bolsillo, para posar ante las cámaras.
Él es el responsable del diseño de Scalper y la mejor imagen de la marca: una mezcla de estilo clásico inglés con ese toque atrevido de dandy italiano. “No tengo formación en diseño – reconoce – pero he vivido 10 años fuera de España y desde pequeño he estado vinculado al mundo de la moda, lo que me ha permitido crear mi propio estilo.”
Por allí andaban sus buenos amigos catalanes: el empresario José María Xercavins, los relaciones públicas Carlos Martorell y Carlos Telmo, la interiorista Patricia Sanchiz, y el arquitecto Alvaro Oliver Bultó, nieto del fundador de la mítica firma de motos Bultaco y autor del proyecto de la tienda Scalpers de Barcelona.
Acudieron también algunos colegas del mundo de la moda como los hermanos Iñaki y Aitor Muñoz, de la firma Alianto; Luis Sans, de Santa Eulalia y, por supuesto, varias de esas vistosas it girls, blogueras y coolhunters que no se pierden ninguna party.
A Rafael Medina y sus socios les funciona bien la firma Scalpers. Abrieron la primera tienda en el 2007 y llevan ya 10 establecimientos propios inaugurados, córners en el Corte Inglés y un total de más de 100 puntos de venta multimarca repartidos por toda la geografía española, así como en México, Francia, Portugal, Bélgica, Escandinavia y Alemania.
La empresa cerró el ejercicio 2011 con una facturación de seis millones de euros y prevé alcanzar los 8´5 millones en el 2013. Ahora buscan locales en París para instalar allí su primer punto de venta propio fuera de España, mientras ultiman la entrada de un nuevo socio. “Estamos negociando con varios fondos interesados en formar parte de Scalpers, porque para mantener este ritmo de crecimiento debemos buscar financiación”, dijo Medina.
El establecimiento barcelonés, de 250 metros cuadrados, ha supuesto una inversión de 350.000 euros. Esta tienda, además de la colección Scalpers de prêt-à-porter, trajes y camisas, incluye un apartado de sastrería a medida y la línea Scalpers Kids para niños de 4 a 14 años. Sin renunciar a los complementos que definieron la marca desde sus inicios: las corbatas y sus slippers, las zapatillas que usaban los aristócratas del s.XIX, con la inconfundible calavera bordada, que se han hecho famosas en toda España.