Varias sociedades

En España existen varias sociedades que se definen no por lo que se lucha, sino contra qué se lucha y que no dejan de pelear entre ellas para seguir estando juntas

Miembros de asociaciones memorialistas y en favor de la memoria histórica se han concentrado este domingo, 18 de julio, en las puertas del Congreso para reclamar una condena al franquismo y una ley de memoria democrática coincidiendo con el 85 aniversario de la sublevación militar que inició la Guerra Civil. EFE/Mariscal

La pregunta que muchas personas se hacen es si en España, como ocurre en Francia, existen varias sociedades y no solo una, a la que siempre invoca el poder político. Se da por hecho que la sociedad española está cohesionada y que se expresa como una unidad social, más allá de las diferencias políticas.

Una gran parte de los ciudadanos consideran que el vínculo de la sociedad con la selección española de fútbol, con la monarquía, con el ejército o con el castellano como lengua española demuestra que se expresa en una sola dirección. En el sentido opuesto, hay los que consideran que España no está bien vertebrada ya que aún se disputan cuestiones del pasado y no hay acuerdos comunes para abordar el futuro.

La España que defiende la memoria histórica, la España que aspira al federalismo, la que quiere romper con España y la que busca desprenderse del pasado consideran que en España cohabitan varias sociedades. Estas sociedades se sienten representadas, unos por la coalición de izquierda y otros por la coalición de derecha.

Se dice que la España de Vox nada tiene que ver con la de Podemos y la del PSOE tampoco tiene nada que ver con la del PP. Son sociedades que se toleran o se evitan cortésmente pero que aspiran a un modelo de vida muy distinto. Se habla mucho de España pero muy poco sobre la sociedad que constituye la nación.

Al gobierno de España le cuesta definir la sociedad a la que debe servir. Un vasco o un catalán alcanza a ver cómo es la sociedad vasca o catalana pero no consigue establecer cómo está compuesta la sociedad española. Los que piensan en la sociedad española como un corolario de emociones y símbolos que se extienden sin contracciones en los ciudadanos no han acabado de advertir que la identidad ya no depende tanto de causas exteriores sino de la voluntad de cada persona de definirse como quiere.

Los que consideran que la sociedad española está fracturada por razones territoriales, ideológicas y de disputa por la historia olvidan que la sociedad española siempre ha estado en disputa, de forma muy intensa desde el siglo XIX hasta nuestros días, y aun así ha sido siempre capaz de expresarse en momentos concretos como una sola, como cuando se votó la constitución española.

La España irreconciliable o los proyectos de una tercera España nos remiten a la idea de un país donde la sociedad se define más en función de contra quién lucha que por lo que aspira conseguir. Podemos llegar a la conclusión de que en España hay varias sociedades que no cesan de pelear entre ellas para seguir estando juntas.