El entorno de Iglesias denuncia ‘golpismo’ en la Guardia Civil

El ministro Garzón y el portavoz parlamentario de Podemos, Jaume Asens, cierran filas con Marlaska tras su purga en la Guardia Civil

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El ministro de Consumo y líder de Izquierda Unida, Alberto Garzón, ha salido este jueves en defensa del ministro del Interior, Fernando Grande- Marlaska, alegando que «dentro» de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado hay «elementos reaccionarios» que se suscriben al «discurso que invita al golpe de Estado» que alienta la «derecha política». Casi al mismo tiempo, el portavoz parlamentario de Unidas Podemos, Jaume Asens, ha denunciado que hay agentes de la Guardia Civil que trabajan para «desestabilizar el Gobierno».

Por su parte, el vicepresidente segundo, Pablo Iglesias, se ha implicado con el ‘caso Marlaska’ con ostensibles ovaciones en pie dirigidas al ministro durante alguna de sus comparecencias en el Congreso de los Diputados. Pero poco más. La oposición le acusó la semana anterior de calificar al general cesado de la Guardia Civil, Diego Pérez de los Cobos, de «viejo guardia civil que desobedeció una orden», pero en realidad el vicepresidente segundo se remitía a una anécdota histórica de otro guardia civil que había sido recordada por el PP.

Su entorno, en cambio, ha salido públicamente en defensa del ministro, o bien contra algunos agentes de la Guardia Civil a los que se busca vincular con las «cloacas» y la policía política. «Creo que en este contexto todo el mundo cierra filas con el ministro, más allá de las discrepancias», ha afirmado Asens, partidario del cese de De los Cobos desde las cargas del 1-O. Marlaska «está siendo víctima de una operación promovida por sectores extremistas de derecha, con voluntad de desestabilizar al Gobierno», ha añadido.

Recogiendo el testigo de las acusaciones de Iglesias a Marlaska en abril de 2019, antes de las elecciones del 28-A, el portavoz de Podemos ha dicho que Pedro Sánchez tal vez «no era consciente y pensaba que las dinámicas de policía habían cambiado, que no había dinámicas propias de la policía patriótica», entendiendo que el caso de De los Cobos y su participación en el juicio del 8M demuestran, a su juicio, lo contrario. «Hay estamentos del Estado que pueden trabajar en contra», ha afirmado.

«Una minoría invita al golpe de Estado»

De la misma forma que Asens asegura que hay agentes de la Guardia Civil con intereses comunes con la oposición, por tener mayor sintonía ideológica, Garzón cree que es una combinación explosiva si se mezcla con su convicción de que hay partidos de la derecha que pujan por un golpe de Estado. Ya Iglesias protagonizó un rifirrafe la semana pasada cuando afirmó que Vox tenía un mensaje golpista, y ahora el ministro de Consumo coge el testigo para ahondar en esa percepción.

El mensaje de PP y Vox es «peligroso», según Garzón, porque acusan al Gobierno de «criminal» por su gestión del coronavirus. El de la derecha es «un discurso que está calando, y muchas instituciones pueden ser reflejo de ello», ha señalado, tras ser consultado por el caso Marlaska. «¿Puede que haya elementos reaccionarios dentro que asuman como propio ese discurso que a veces incluso invita al golpe de Estado aunque sea a nivel discursivo? Puede. Pero son absoluta minoría y no ponen en riesgo la democracia».

El titular de Consumo ha subrayado que la «mayoría» de los guardias civiles y policías «no se dejan arrastrar» y están del lado de las instituciones, pero ha denunciado el tono «excesivo, dramático e hiperventilado» de PP y Vox, que enmarca dentro de una «estrategia» para «desgastar» al Gobierno «a cualquier precio». Esto, cree, «lo único que hace es encender los ánimos de la gente que se radicaliza y se crispa» y, según el resto de sus declaraciones, avivar una suerte de ‘golpismo’ en partes de los cuerpos de seguridad.

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