Bruselas da la espalda a Sánchez y le invita a tomar medidas para atajar el precio de la luz

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, considera «insuficientes» las medidas de la Comisión Europea para luchar contra la escalada de los precios de la luz. Pero, en realidad, Bruselas invita a Sánchez a que sea su Gobierno quien las tome y no la Unión Europea. Países como Alemania y Francia se oponen a la reforma del mercado de la energía que propone España. Sánchez insiste en que las medidas se tienen que tomar en el conjunto de la UE, cuando una amplia mayoría de países defiende todo lo contrario. Mientras el precio de la luz vuelve a batir récord histórico superando los 300 euros el megavatio/hora.

En una comparecencia, sin permitir preguntas a los periodistas, Sánchez tachó de «insuficientes» las medidas anunciadas por la Comisión Europea para abordar la crisis energética. a Juicio del presidente del Gobierno, se necesitan «más» y «más rápido». Sin embargo, las propuestas de Bruselas no están orientadas a atajar rápidamente el aumento de los precios de la energía.

El análisis que hacen desde Bruselas es bien distinto a la pedagogía de Moncloa. Los 27 hablan de «escalada es coyuntural» y, si fuera necesario, cualquier medida para mitigar los efectos del aumento de precios debe venir de los Estados miembros, y no de la Unión Europea. Un mensaje totalmente opuesto a lo que escuchamos en algunos ministros o el propio presidente, en defensa de su plan.

Bruselas sigue dando la espalda en la última cumbre del año. El presidente logró convertir en prioritario el asunto de la energía en el último consejo europeo celebrado en octubre y consiguió que se encargaran informes para estudiar la situación a la Agencia de Cooperación de los Reguladores de la Energía (ACER) y a la Autoridad Europea de Valores y Mercados (ESMA). Sin embargo, los informes preliminares de las agencias europeas han dado la razón a la Comisión y al bloque de países liderado por Alemania.

«No podemos apoyar ninguna medida que represente una desviación de los principios competitivos de nuestro diseño de mercado de electricidad y gas», reza el comunicado que hasta 11 países europeos lanzaron en contra del criterio de España.

«Estamos de acuerdo con la Comisión Europea en que, a corto plazo, la subida de precios puede abordarse mejor mediante acciones nacionales temporales y específicas de los Estados miembros, cuando proceda, para proteger a los consumidores y empresas vulnerables», señalaron los firmantes.

Compra conjunta de gas con muchos matices  

Los informes mencionados deslizan que la propuesta de España podría poner en riesgo el suministro. Sánchez también presumió de que Bruselas había comprado su propuesta de establecer un mecanismo de compra conjunta de gas, para mejorar el poder de financiación y con ello conseguir atajar el aumento de precios.

Sin embargo, el Gobierno tampoco puede ponerse la medalla. De hecho, Sánchez ni lo ha mencionado después de que Bruselas haya puesto tantas condiciones, como por ejemplo, que esa compra conjunta de gas sea voluntaria y solamente se pueda utilizar en casos de extrema necesidad. Así, el Ejecutivo comunitario pone en duda que ésta ocasión sea suficiente para hacer uso de esta reserva conjunta.

“Es cierto que la Comisión ha aceptado una de las propuestas del Gobierno de España, que es la compra centralizada de gas y por tanto también poder tener una reserva estratégica de gas en Europa. Creo que es una buena noticia, pero es insuficiente. Continuamos con precios de la energía al alza en toda Europa», fueron las únicas palabras de Sánchez al respecto.