Garamendi agua la fiesta de Sánchez con la CEOE y los sindicatos
La amenaza del presidente de una reforma fiscal "inevitable" no es de recibo para la CEOE y Cepyme, que creen que no es el momento de subir impuestos
Pepe Álvarez (UGT), Unai Sordo (CCOO), Pedro Sánchez, Antonio Garamendi (CEOE) y Gerardo Cuerva (Cepyme) en el palacio de la Moncloa en la presentación del pacto por la recuperación económica, el 3 de julio de 2020 | EFE/CM
Los empresarios han rechazado este viernes la reforma fiscal «inevitable» anunciada por Pedro Sánchez en una entrevista el jueves. El presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, ha afirmado que ahora no es el momento de abrir el debate sobre una subida de impuestos sino de buscar formas de combatir la economía sumergida, de donde prevé que podrían salir «un montón de millones» en recaudación. Por su parte, el jefe de Cepyme, Gerardo Cuerva, ve la decisión de subir impuestos a las grandes empresas como un «error».
Así lo han trasladado Garamendi y Cuerva este viernes en un acto en los jardines del Palacio de la Moncloa para suscribir el pacto para la reactivación económica y por el empleo, en el que también han participado los secretarios generales de CCOO y UGT, Unai Sordo y Pepe Álvarez, que por su parte no se han mostrado de acuerdo con la reforma fiscal anunciada por el presidente del Gobierno. «Más tarde que temprano” habrá que replantear el modelo de “corresponsabilidad fiscal para hacer frente a lo que va a venir», ha afirmado Sordo.
Garamendi ha afeado –una vez más– haberse enterado «por la prensa» de algunos proyectos de ley. Lo mismo sucedió cuando se anunció el pacto entre PSOE, Podemos y Bildu para derogar la reforma laboral. «No compartimos el planteamiento fiscal» del Gobierno, ha señalado el presidente de la CEOE. «No es el momento de estos temas». Por otra parte, Cuerva ha criticado que la subida de impuestos a grandes empresas «también repercute en las pequeñas y puede lastrar el crecimiento económico y la inversión».
Tras escuchar las críticas de los empresarios, que en varias ocasiones durante los últimos meses han cortado el diálogo con el Gobierno por diferentes tensiones, Sánchez ha insistido en la subida de impuestos. «Tenemos que salir [de la crisis] con una mayor cohesión social y eso tiene que llevar aparejado una reforma fiscal que vincule reforma fiscal con esa necesaria justicia social». En su entrevista del jueves, el jefe del Ejecutivo también dijo que la subida de impuestos «tenemos que acompasarla con el crecimiento económico».
Pacto para la reactivación económica
El pacto para la reactivación económica y por el empleo que se ha presentado este viernes se construyó en tiempo récord, según reconoció Sánchez, «en un contexto de enormes desafíos». El presidente ha asegurado que el acuerdo tiene dos pilares: proteger empleos y empresas, y avanzar en activar la economía y recuperar la actividad económica después de esta emergencia sanitaria que afortunadamente gracias a los sectores públicos tenemos controlada».
Sánchez, los empresarios y los sindicatos se han comprometido a llevar a cabo una serie de medidas económicas y laborales que más parece una declaración de intenciones que una hoja de ruta. Entre los puntos del acuerdo está impulsar la reincorporación a las empresas de los trabajadores afectados por los ERTE, desarrollar mecanismos eficaces para la capacitación de los trabajadores, establecer un marco para el teletrabajo y poner en marcha un pacto por la industria, entre otros.
«Que las principales fuerzas sindicales y empresariales lleguen a acuerdos sólidos y con durabilidad es un excelente indicador de la salud democrática del país y da un mensaje de confianza a la sociedad, pero sobre todo a los socios europeos y a todo el mundo», ha afirmado Sánchez en el acto en la Moncloa. El presidente ha celebrado este acuerdo «por su amplio recorrido y por la unidad que proyecta».
