Puigdemont se rinde ante el Pdecat con los presupuestos

Puigdemont allana la tramitación de los presupuestos al asumir que no tiene la capacidad de vetar la predisposición del Pdecat a tramitarlos

Recibe nuestra newsletter diaria

O síguenos en nuestro  canal de Whatsapp

El expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont ha optado este viernes por rendirse y quitarse de en medio en la polémica en el seno del independentismo sobre si permitir o no la tramitación de los Presupuestos Generales del Estado (PGE), el anteproyecto de los cuales se presentará en el Congreso el lunes, después de que el ejecutivo de Pedro Sánchez lo haya aprobado en el primer Consejo de Ministros del año.

El debate en el que ahora mismo está inmerso el independentismo no es si aprobar o no finalmente las cuentas, porque la decisión, que es la de tumbarlos, se supone que está tomada desde hace muchas semanas, sino si permitir la tramitación parlamentaria. 

Puigdemont, que se reunió con Quim Torra en Waterloo, que se oponía a todo (a la tramitación y a la aprobación), optó por conformarse con que el Pdecat como ERC ya «han explicitado pública y reiteradamente su negativa a aprobar los presupuestos». Cuando le preguntaron por la tramitación, cambió de tercio.

Torra, desautorizado

La decisión, dijo el líder huido, corresponde a los dos grupos parlamentarios independentistas en Madrid. El gobierno de la Generalitat y los grupos del Parlament, dijo en referencia a Junts per Catalunya (JpC), «pueden tener opinión política, pero no tienen capacidad de decidir». A su lado, Torra, que no añadió nada al respecto, se limitó a asentir, aunque había asegurado hace apenas unas horas que los independentistas no permitirían la tramitación. 

Así que serán Pdecat y ERC, argumentó, quienes tendrán que decantarse y decidir también «cómo argumentan tanto la presentación de una enmienda a la totalidad como la no presentación» de la misma. 

La intervención de Puigdemont, cuyos afines, con Miriam Nogueras, número dos del Pdecat, a la cabeza, se habían signficado a favor de la enmienda a la totalidad, deja ahora manos libres ante los favorables a permitir tramitar las cuentas, entre las cuales, la exconsellera de ERC Dolors Bassa, en prisión preventiva y que esta semana abogó públicamente por exprimir hasta marzo el debate presupuestario.

Las discrepancias soberanistas

En las dos últimas semanas, han aflorado diferencias tanto en el seno del Pdecat como de ERC, las dos fuerzas independentistas con presencia en Madrid, y en las que han ido imponiéndose los partidarios de permitir que se exprima la tramitación, pese a que el propio Torra se manifestó el miércoles contrario a esa opción salvo que hubiera algún gesto por parte de Sánchez.

Gesto lo ha habido, pero no el único que interesa a Torra, es decir la cacareada «solución política» a la situación en Cataluña que, en lenguaje soberanista, no es otra que la autodeterminación. En lugar de eso, Sánchez plantea aumentar la inversión prevista en Cataluña hasta el 18%, en línea por primera vez con los parámetros que fijaba la disposición adicional tercera del Estatut.

Así que para justificar la decisión de avalar la tramitación deberá bastar con eso y la reactivación a efectos formales de las conversaciones entre la Moncloa y la Generalitat, con una nueva reunión (esta vez, sin Sánchez ni Torra) que los negociadores de ambos ejecutivos ya preparan para este mismo enero.

 

Recibe nuestra newsletter diaria

O síguenos en nuestro  canal de Whatsapp