8 cócteles fáciles y resultones para triunfar en San Valentín
Fáciles de elaborar y con un punto afrodisíaco, estos cócteles son perfectos para el día de los enamorados (y cualquier otro)

Cócteles para celebrar le amor. Foto: Neha Deshmukh | Unsplahs.
Importante para algunos, invento comercial para otros, San Valentín, el 14 de febrero, es también la excusa perfecta para disfrutar de conversación y compañía en torno a un buen cóctel, mejor si lo hemos preparado nosotros mismos.
Fáciles de preparar y con un punto afrodisíaco, pero sin necesidad de conocimientos de coctelería, ingredientes extraños o sofisticados útiles, estos son los combinados perfectos para deslumbrar a la pareja.
Campari Tonic
Empezamos con un cóctel moderno y refrescante, el Campari Tonic, que tiene como base una leyenda de la coctelería como es Campari, cuya fórmula aún hoy se mantiene en secreto.
Se sirve en una copa tipo globo que contenga hielo previamente para que se enfríe. Después se vierte el campari y la tónica con una rodaja de limón.
Love Potion
Un cóctel de nombre apropiado aunque algo grandilocuente. No garantizamos que sea una auténtica poción de amor, pero sí que su textura helada y el bajo nivel de alcohol lo hacen tan suave que puede resultar engañoso…
Para prepararlo necesitamos media taza de fresas frescas, de temporada, una bola de helado de vainilla, una parte de vodka y otra de crema de cacao blanco.
Una vez mezclados los ingredientes con el hielo se sirve en una copa Margarita decorada con fresas.
Bloody Mary
Un clásico pero que viene muy bien para poner interesante la noche de San Valentín. Se prepara a base de vodka y zumo de tomate y se le añaden especias.
Este cóctel, cuyo origen se sitúa en el New York Bar de París en los años 20, tomaría el nombre de la famosa reina de Inglaterra María Tudor, que era muy cruel con sus opositores (de hecho, recibió el nombre de María la Sanguinaria, entre otras truculentas historias).
En este caso proponemos una receta para prepararlo en casa sin coctelera. Se necesitan dos partes de vodka, tres partes de zumo de tomate, seis gotas de salsa Worcester, sal, cinco gotas de Tabasco, unas gotas de zumo de limón pimienta negra y, finalmente, para decorar, el clásico tallo de apio.
Se mezclan lentamente los ingredientes (muy importante hacerlo en el orden indicado arriba) y después se remueve todo en el vaso en el que se sirve, un clásico vaso alto al que se le añaden unos cubitos de hielo.
Negroni
Otro clásico y delicioso cóctel es el infalible Negroni. En este caso procedente de Italia, de fácil elaboración y un resultado de aromas y sabores increíbles.
Se prepara en vaso ancho con hielo, siguiendo este orden y por partes iguales: ginebra, vermut rojo, y Campari. Se remueve y se decora con naranja.
Una variedad del Negroni es el Negroni Sbagliato, como indica la palabra en italiano es un ‘Negroni equivocado’ puesto que en lugar de la ginebra se prepara con un espumoso brut Nature, y et voila!
Daiquiri de San Valentín
Es una bebida ligera, muy fácil de preparar y está llena de connotaciones vinculadas a una noche más que excitante.
Para preparar el daiquiri se puede utilizar una copa de cóctel o una copa Margarita previamente enfriadas. Se ponen fresas de temporada trituradas en la batidora, para que suelten el zumo, y se añaden dos partes de ron blanco, una de zumo de lima y otra de almíbar que habremos conseguido hirviendo azúcar con agua.
Se agita la mezcla y se añade hielo pilé, adornando el borde con fresas.
Mimosas de fresa
Es otro clásico de San Valentín, facilísimo de hacer y al mismo tiempo muy seductor es la Mimosa de fresa.
Para prepararla se utilizan fresas, uvas blancas y espumoso. Con la batidora se mezclan las uvas y las fresas hasta conseguir un jugo fluido y suave.
Para servirlo se utilizan copas de flauta que se llenan hasta la mitad con la mezcla de las frutas, mientras que el resto se rellena con el espumoso.
La mimosa de fresas presenta variaciones interesantes como en lugar de fresas utilizar otra fruta roja dulce como sin las frambuesas. En cualquier caso es importante decorar la copa con una rodaja de esa fruta roja.
Batida de Coco
Un cóctel, cuya base es el licor de caña de azúcar brasileño, la cachaza, que en esta ocasión no acaba como caipirinha.
La batida de coco es un cóctel goloso, suave y espumoso que utiliza también batidora. Los ingredientes son nuez moscada en polvo, una parte de zumo de lima exprimido una parte de leche de coco -se puede encontrar en la mayor parte de supermercados-, dos partes de sirope de fruta de la pasión que podemos comprar en lata y, finalmente, tres partes de cachaza.
Se echa todo a una batidora con hielo picado y se tritura. Se puede servir en un vaso ancho adornado con la nuez moscada rayada en su borde. Para adornar el vaso se moja el borde con cachaza y hace rodar por la nuez moscada de forma semejante a la sal de la margarita.
Margarita
Y hablando de Margarita no podía faltar entre los cócteles del 14 de febrero una margarita con su tequila y el zumo de lima, pero a la que se le añadiría fresas, tanto batidas como de decoración.
No hay que olvidar que las fresas, que aparecen en casi todos los cócteles de San Valentín descritos, son unas frutas muy afrodisíacas.