Atenas mantiene su plan de reformas pese a la presión comunitaria

Crece la tensión entre el Eurogrupo y Atenas en torno a la petición de una prórroga del programa de ayudas, que supondría anular el programa electoral de Syriza

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La tensión entre el nuevo Gobierno griego y la Unión Europea se mantiene 24 horas después de que el Eurogrupo diera un ultimátum a Atenas para que antes del viernes solicite la prórroga del programa de rescate, lo que equivale a echar por tierra las promesas electorales con que Syriza ganó las elecciones.

El primer ministro griego, Alexis Tsipras, anunció hoy que el Gobierno «no dará marcha atrás» y a partir del próximo jueves empezará a presentar en el Parlamento las primeras medidas prometidas a los electores.

«La parte tóxica de la troika»

«No chantajeamos, pero tampoco nos dejamos chantajear. Trabajamos por un acuerdo sin austeridad y sin memorando, por un acuerdo sin la parte tóxica de la troika», dijo Tsipras ante el grupo parlamentario de Syriza en una intervención retransmitida en directo.

Tsipras anunció que el mismo jueves, tras la elección del presidente de la República, se introducirá en el Parlamento la primera ley para proteger contra los desahucios de primera vivienda y para impedir la transferencias de deudas morosas a «cazadores de deudas».

Aplazar el pago de impuestos

El jueves también, añadió, se llevará al Parlamento la ley que amplía el círculo de personas que pueden acogerse al pago en cien plazos de sus deudas con Hacienda, una legislación que, según dijo, «aliviará el peso de muchas familias».

«Espero que estas dos leyes se hayan aprobado el viernes por la tarde para que el pueblo sepa quién está de su lado y quién está del lado de los intereses oligarcas», añadió.

Las mismas leyes laborales que en Europa

El primer ministro anunció que en breve el Gobierno presentará otra ley que pondrá fin a la desregulación de la legislación laboral, emprendida por el anterior Ejecutivo de Andonis Samarás, que, entre otras medidas, liberalizó el despido y abolió de facto los convenios colectivos.

«En cooperación con la Organización Internacional de Trabajo (OIT) restituiremos (en Grecia) la legislación europea en materia de relaciones laborales», añadió.

Tsipras aseguró que su Gobierno no tiene intención de dar «ni un sólo paso atrás» de nuestro programa adoptado por el Parlamento hace unos días y prometió que en breve se legislarán también todas las medidas para hacer frente a la crisis humanitaria.

«No pondremos en juego la confianza del pueblo a favor de los intereses de los acreedores», dijo y agregó que la «primera deuda» que tiene que devolver Grecia es la de hacer frente a la «crisis humanitaria» que padecen muchos ciudadanos.

Presión desde Bruselas

Mientras tanto, en Bruselas continúan los pronunciamientos conminatorios hacia el Gobierno de Syriza, entre ellos y de forma destacada Luis de Guindos, el ministro español de Economía.

Y también los desmentidos. El propio comisario de Economía, el francés Pierre Moscovici, ha negado que como afirma Yanis Varoufakis, el titular griego de Finanzas, él le hubiera propuesto el lunes un texto de acercamiento a los postulados griegos que fue sustituido después por el ultimátum por imposición del presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem.

Economía Digital

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