CEOE cede ante el chantaje de Yolanda Díaz y consulta si acuerda subir un 4% el SMI

La Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) se encuentra actualmente inmersa en una consulta interna tras ceder a la presión que algunos sectores perciben como chantaje por parte de la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz. La consulta tiene como objetivo determinar si la CEOE acepta el acuerdo propuesto por el Ministerio de Trabajo de un aumento del 4% en el salario mínimo interprofesional (SMI) para el año 2024.

Los sectores más afectados son aquellos intensivos en mano de obra con salarios bajos, como los servicios de limpieza y seguridad, que prestan servicio al sector público. En estos casos, los contratos vigentes no se actualizan al SMI debido a restricciones legales de desindexación.

Fuentes empresariales explican que algunas patronales prefieren una subida acordada del 4% para evitar mayores riesgos y posiblemente enfrentarse a un incremento mayor si no aceptan el acuerdo propuesto por el Ministerio de Trabajo y los sindicatos.

Sin embargo, el sentir general dentro de la CEOE es de malestar ante la propuesta del Ministerio de Trabajo, que ha advertido a los empresarios que, en caso de no aceptar el aumento del 4%, la subida podría ser aún mayor.

La decisión de unirse al acuerdo propuesto o no se tomará probablemente en una reunión extraordinaria del Comité Ejecutivo y la Junta Directiva de la CEOE, la cual podría convocarse antes del viernes. El Ministerio de Trabajo busca resolver este asunto ese día para iniciar los trámites necesarios y aprobar la subida en el Consejo de Ministros antes de que finalice el mes.

CEOE partidaria de subir el SMI

El presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, ha criticado públicamente lo que considera una amenaza por parte del Ministerio de Trabajo. Se quejó de que a través del SMI, el Gobierno está regulando la negociación colectiva, ya que la retribución mínima afecta cada vez más a las tablas salariales negociadas en convenios colectivos.

En un almuerzo coloquio en el Club Siglo XXI, Garamendi expresó su descontento, argumentando que la patronal abogaba por un incremento del 3,5% en el SMI al inicio de las negociaciones, en línea con lo acordado en la negociación colectiva y la inflación media de 2023.

Además, sugirió que la negativa del Gobierno a indexar los contratos públicos al SMI y tratar de manera especial el trabajo en el campo son líneas rojas difíciles de traspasar para los empresarios.