La nueva Caixa Catalunya ha cerrado ya 160 sucursales

La fusión de Caixa Catalunya, Tarragona y Manresa avanza a buen ritmo de acuerdo con los resultados presentados ayer por la nueva entidad, entre los que el grupo financiero destaca que ya se ha producido el cierre de 160 oficinas, el 40% de todas las sucursales que serán eliminadas. En los primeros seis meses del año, el grupo que dirige Adolf Todó ha obtenido un beneficio después de impuestos de 91 millones de euros, el 7,5% más que en el último ejercicio.

Una de las especificidades de las cuentas que Todó ha presentado ante la CNMV es que todavía no incluyen la plusvalía de 415 millones de euros que se obtiene por la venta a Mapfre del 50% del grupo asegurador. Asimismo, la nueva caja de ahorros, una de las que suspendió las pruebas de solvencia realizadas por el Banco de España, informa de que su tasa de morosidad se ha situado en el 5,22%, «0,09 puntos inferior en comparación con la agregada a junio de 2009, dato relevante si se compara con la tendencia al alza que se sigue observando para el conjunto del sector».